El tribunal correccional de primera instancia de Bruselas decidirá hoy si mantiene el prisión preventiva a la eurodiputada socialdemócrata Eva Kaili, destituida como vicepresidenta del Parlamento Europeo por su supuesta implicación con el escándalo de los presuntos sobornos que salpican a Catar y Marruecos.
La vista, programada a las 9.00 hora local ante la Cámara del Consejo de Bruselas, en el Palacio de Justicia, tenía que haberse celebrado el pasado día 14, pero la audiencia se retrasó por una huelga de funcionarios en el centro penitenciario en el que se encuentra encerrada la política griega.
Ese día sí comparecieron otros tres imputados por presunta participación en organización criminal, blanqueo de capitales y corrupción en relación con un país árabe.
El juez decidió mantener en prisión preventiva a Pier Antonio Panzeri, exeurodiputado socialista y presunto cabecilla de la red de sobornos, y a Francesco Giorgi, asistente parlamentario en la Eurocámara y pareja sentimental de Kaili.
El magistrado dejó en libertad al "lobista" y secretario general de la ONG No Peace Without Justice (Sin paz no hay justicia), Niccolo Figa-Talamanca, pero se le obliga a llevar un brazalete electrónico, según un comunicado difundido por la Fiscalía belga.
Según las informaciones publicadas desde entonces por medios belgas e italianos como Le Soir y La Repubblica, Kaili habría confesado a la policía su implicación en la trama y reconoció que pidió ayuda a su padre, a quien la policía descubrió sacando dinero en bolsas de un hotel en Bruselas, para esconder dinero en efectivo que tenía en casa.
También Giorgi habría confesado estar implicado, aunque eximió de cualquier responsabilidad a su pareja y madre de su hija, y lo mismo Panzeri, quien habría reconocido pagos de 50.000 euros de Catar y Marruecos en 2019, es decir, sólo después de haber abandonado el escaño de eurodiputado que ocupó entre 2004 y 2019.
Antigua presentadora de televisión, Kaili se inició en política en 2009 con el PASOK griego, llegó al Parlamento Europeo en 2014 y ocupaba una de las catorce vicepresidencias de la Eurocámara desde enero de 2022, cargo que le ha sido retirado aunque mantiene su condición de eurodiputada.