Las autoridades ucranianas anunciaron este domingo que varios ataques rusos producidos a última hora del sábado dejaron al menos tres civiles muertos y varios heridos en el sur y en el noreste del país.
La administración regional de la región de Zaporiyia (sur), bajo ocupación parcial de las tropas rusas, afirmó que en la capital provincial homónima una mujer de 32 años y un hombre de 4 murieron por el impacto de un proyectil ruso.
Al mismo tiempo, dos mujeres, de 36 y 55 años, sufrieron lesiones y tuvieron que recibir tratamiento hospitalario, añadió la institución a través de su canal de Telegram.
En la jornada de ayer, de acuerdo con la agencia "Ukrinfrom", se registraron en la región de Zaporiyia un total de 77 ataques rusos contra una veintena de localidades diferentes.
Entretanto, en la ciudad de Sumy (noreste), un cohete ruso impactó en un centro educativo a última hora de la tarde, de acuerdo con la Policía Nacional de Ucrania, lo que mató a un civil y causó heridas a otros cinco.
"Según datos preliminares se sabe al menos de un muerto y de cinco civiles heridos", afirma el mensaje difundido en redes sociales por la Policía, que agrega que se ha abierto una investigación por la comisión de un posible crimen de guerra.
A lo largo de la noche y durante las primeras horas de la mañana del domingo se contabilizaron en la región de Sumy un total de 14 ataques rusos, según fuentes ucranianas.
De acuerdo con la agencia "Ukrinform", en las últimas 24 horas los ataques rusos también han dejado civiles heridos en la región de Jersón (sur), mientras que en Járkov (este) se han producido daños materiales.
La Fuerza Aérea de Ucrania aseguró esa mañana que durante la noche ha derribado un total de ocho drones rusos en las regiónes de Jersón y de Dnipropetrovsk (sur).
Según un comunicado de la institución en Telegram, cuatro de los drones eran de tipo "Shahed-136" (drones kamikaze de fabricación iraní) y el resto eran aparatos de reconocimiento.