Cerca de un centenar de personas se acumularon este viernes ante las puertas de la céntrica tienda de Apple de la Puerta del Sol madrileña para ser las primeras en hacerse con un iPhone 11, la última versión de uno de los móviles más emblemáticos de la historia.
"Con muchas ganas de tenerlo ya en mis manos. He esperado toda la noche pero merece la pena", ha explicado a Efe minutos antes de la apertura el costarricense Sleyter Angulo, el primero de la fila formada frente al establecimiento y que no podía ocultar su entusiasmo, después de haber pasado allí nueve horas esperando.
El joven ha sido el primero en entrar en el establecimiento, poco antes de las ocho de la mañana y después de que los empleados abrieran las puertas desde dentro y, entre gritos de entusiasmo, salieran a aplaudir al algo más de un centenar de personas que esperaban en el exterior para hacerse con alguna de las versiones del último modelo del popular teléfono.
Tras él, y uno a uno, han ido entrando en la tienda primero los clientes que tenían reservados sus aparatos y luego los que se han presentado allí sin reserva alguna, ya que Apple suele ofrecer esta posibilidad para quienes no pudieron hacerla por algún motivo o quieren cambiar el modelo elegido inicialmente.
Como en este establecimiento madrileño, en muchas otras ciudades del mundo se han repetido imágenes similares, puesto que Apple ha coordinado el estreno de su último modelo de iPhone para que en todos los países se abran las puertas de sus centros a las ocho de la mañana, horas locales.
Las imágenes más esperadas son las de su icónica tienda de la Quinta Avenida de Nueva York, que además reabrirá este viernes sus puertas para la ocasión tras una profunda renovación.