El nieto de la septuagenaria asesinada a golpes en su domicilio el pasado miércoles se ha entregado en la prisión del municipio ourensano de Pereiro de Aguiar este viernes, después de que el dispositivo policial hubiese mantenido especial incidencia en las ciudades de Ourense y Vigo para tratar de localizarlo.

   Según han confirmado fuentes policiales, el chico y presunto autor de los hechos, que responde a la identidad de J.L.P., de 29 años de edad, se entregó en la prisión ourensana, a donde se desplazaron agentes de la Policía Nacional para trasladarlo ya detenido a la Comisaría de Ourense.

   Las mismas fuentes han señalado que en próximas horas pasará a disposición judicial para que le sea tomada declaración. En este sentido, han señalado que, por ahora, desconocen el paradero que mantuvo desde que ocurrieron los hechos hasta que este viernes se entregó.

   El dispositivo fijó como puntos más vigilados las zonas de trapicheo de droga, ya que el principal sospechoso de la muerte de Dolores Rodríguez, de 77 años de edad, sufre dependencia a la cocaína y los agentes barajaban que podría intentar hacerse con una dosis.
VIGILANCIA

   En la capital de As Burgas, la Policía mantuvo vigiladas tanto la estación de ferrocarril de la ciudad como la de autobuses; al tiempo que se activó un dispositivo en Vigo, donde residen algunos amigos y familiares del principal sospechoso del crimen.

   Asimismo, la Policía envió una fotografía de J.L.P. a todas la Comisarías de España, para que pudiese ser identificado en el caso de que hubiese huido.

   J.L.P. tiene antecedentes por delitos relacionados con robos, ya que había sido detenido por los agentes en varias ocasiones por estos hechos, y es un "conocido" entre las fuerzas de seguridad en la ciudad de Ourense por ser "conflictivo" debido a sus problemas con las drogas y a haber participado en peleas callejeras.

SECRETO DE SUMARIO

   El juez titular del Juzgado número 1 de Ourense decretó el secreto de sumario para no entorpecer las investigaciones.

   Mientras, la autopsia que le fue realizada al cadáver de Dolores Rodríguez, confirmó que la septuagenaria falleció como consecuencia de un fuerte golpe en la cabeza, posiblemente con un martillo que fue localizado en la escena del crimen, en su domicilio de la calle Concejo de la ciudad de As Burgas.