Las urgencias del Hospital San Juan de Dios del Aljarafe están, una vez más, al borde del colapso. Así lo asegura el Sindicato Provincial de Sanidad y Sectores Sociosanitarios de CCOO de Sevilla, que alerta de la “grave saturación” en la que se encuentra el centro hospitalario como consecuencia del cierre de camas, la falta de personal y el agravamiento de patologías de pacientes que no han recibido una adecuada asistencia médica especializada durante el periodo de pandemia.
En concreto, se está produciendo el aumento del número de urgencias atendidas y la necesidad de ingreso hospitalario en muchos de estos pacientes, que además sufren un aumento considerable en su tiempo de estancia en las urgencias por la falta de camas en las plantas de hospitalización: “Hay quien llega a permanecer días en un sillón de urgencias de la sala de estancias cortas hasta que se les asigna una cama en planta”, lamenta el presidente del comité de empresa (CCOO) del Hospital San Juan de Dios del Aljarafe, Javier Ordóñez.
Así, CCOO denuncia que, mientras esto ocurre, “la dirección del hospital mantiene cerradas dos alas completas de hospitalización (50 camas), el 25% del total de camas de este centro sanitario, y ha disminuido el personal sanitario que atiende en esa planta”. La decisión, según Ordóñez, “se ha tomado por meros criterios economicistas, para ahorrar gastos y no llevar a cabo la contratación de la plantilla necesaria”.
A esta situación hay que sumar el “alarmante descenso de intervenciones quirúrgicas que se está llevando a cabo durante este verano y que desde CCOO estimamos en un 60% de las intervenciones que realizaron en el mismo periodo de verano de años anteriores. De nuevo, el motivo es el ahorro en gasto de personal, sin tener en cuenta que los y las pacientes que necesitan ser intervenidos agravan su enfermedad por la demora”, señala el presidente del comité de empresa (CCOO).
“Mientras tanto, el personal sanitario continúa desesperado en indignado viendo cómo la dirección del centro no asigna los recurso humanos y materiales adecuados para dar respuesta a las necesidades sanitarias de una población de 300.000 habitantes. Por eso, desde CCOO insistimos en que es fundamental que este hospital y su gestión sean íntegramente públicos y dependientes del Servicio Andaluz de Salud, e instamos a la Consejería de Salud a que intervenga para acabar de una vez por todas con esta situación que afecta a las personas usuarias y el personal del centro”, sentencia Ordóñez.