El juzgado de lo penal 11 de Sevilla acoge mañana el juicio contra los padres del Cuco, el joven condenado por encubrir el crimen de Marta del Castillo, por incumplir la orden de alejamiento de su hijo con la familia de la víctima.
La Fiscalía de Sevilla ha pedido 6.480 euros de multa a los padres del Cuco, Rosalía Inmaculada G.M. y Ángel Manuel R.C.
También está acusado el conductor del vehículo en el que viajaban, Pablo B.R., que el mes pasado entregó en el juzgado 600 horas de conversaciones que habría recogido como supuesto confidente del entorno de la familia del Cuco.
El juicio por este caso estaba previsto para el 25 de marzo del año pasado, pero se aplazó porque no se les dio ocasión de presentar escrito de defensa en la acusación de incumplir el alejamiento de su hijo respecto a la familia de la víctima.
En un escrito al que ha tenido acceso Efe, la Fiscalía solicita para los tres acusados una multa de 18 meses con cuota diaria de 12 euros, lo que equivale a 6.480 euros.
El juicio se dirige contra los padres y el supuesto confidente, que conducía el vehículo que ocupaban junto con el Cuco cuando el 14 de noviembre de 2010 fueron detenidos en la autovía A-4 Sevilla-Cádiz a 25 kilómetros de la capital sevillana.
Sobre el Cuco, que posteriormente fue condenado por encubrir el crimen de Marta del Castillo, pesaba entonces una prohibición de acercarse a menos de 50 kilómetros de Sevilla, como ciudad de residencia de la familia de la víctima, y por ese motivo estaba internado en un piso tutelado de Cádiz.
Al ser menor de edad, sus padres eran los garantes de que se cumpliera la orden de alejamiento de la familia de Marta del Castillo.
El Cuco fue condenado a doce meses de libertad vigilada por incumplir este alejamiento, en una sentencia alcanzada de conformidad con la Fiscalía.
Posteriormente, sus padres comparecieron en la Fiscalía y también se mostraron dispuestos a aceptar una condena, pero no el conductor del vehículo, por lo que no prosperó el acuerdo y los tres deberán acudir al juicio.
El conductor se niega a aceptar ninguna condena, ya que alega que actuó sin intención subjetiva de delinquir y que no se le puede considerar "garante" del cumplimiento de la orden ya que no era progenitor del Cuco.
Su procesamiento, sin embargo, fue confirmado por la Sección Séptima de la Audiencia, quien dijo que "no se puede descartar en absoluto que el acusado conociera que el menor no podía ir a Sevilla o acercarse a esta capital en un radio de 50 kilómetros", por lo que concurren los presupuestos para imputarle el delito como colaborador necesario.
En su defensa, los acusados argumentaron que se trató de un error porque se equivocaron y no tomaron la salida de la autovía que les llevaría a Las Cabezas de San Juan (Sevilla), donde iban a asistir a un cumpleaños y sí respetarían el alejamiento.
Javier G.M., apodado el Cuco, tenía 15 años cuando desapareció Marta del Castillo en enero de 2009 y fue condenado a dos años y once meses de internamiento como encubridor del delito cometido por su amigo mayor de edad Miguel Carcaño, en una condena que terminó de cumplir en marzo de 2013.