Buenas noticias, por fin, para el
Sevilla Fútbol Club en cuanto a la
enfermería. La derrota ante la
Real Sociedad ha desdibujado la sonrisa en la afición blanquirroja, que vio cómo su equipo caía en casa y engrosaba la lista de lesionados añadiendo a
Idumbo, cuyo tiempo de ausencia serán unas dos o tres semanas según el club. Sin embargo, este lunes un
leve rayo de esperanza ha aparecido al confirmarse un ansiado regreso.
Suso volvía a los entrenamientos con el resto del grupo tras superar una
lesión de bajo grado en el aductor largo del muslo izquierdo. El pasado viernes, el gaditano regresó al césped de la
Ciudad Deportiva José Ramón Cisneros Palacios al margen del equipo, pero ha sido este lunes cuando ya se le ha visto junto a sus compañeros.
Criticado en varias ocasiones por su forma de jugar, la recuperación del extremo se antoja vital para un
Xavi García Pimienta que ha perdido a
Ejuke e
Idumbo en apenas dos semanas.
Lukebakio parece el único que aporta algo fresco a la parcela ofensiva del combinado hispalense, más aún con las ausencias de sus compañeros.
Con Suso de nuevo sobre el césped, los siguientes en volver deberían ser
Tanguy Nianzou y
Loïc Badé,
titulares prácticamente indiscutibles para el técnico sevillista. La ausencia de ambos fue diferencial en el partido liguero ante la
Real Sociedad, remarcada además por el
infantil penalti de Marcao que supuso el 0-2 para el combinado donostiarra.
El próximo sábado, el Sevilla visita
Butarque para enfrentarse a un
Leganés que sólo tiene cuatro puntos menos en la tabla y al que los hispalenses han conseguido derrotar en dos de sus últimas cinco visitas ligueras, además de en la
Copa del Rey de
2021, donde los visitantes se impusieron en la prórroga con un gol de Lucas Ocampo