El
Gobierno de José Luis Sanz no ha necesitado llegar al debate de los presupuestos para que se evidencie que
el PP está en minoría en el Ayuntamiento de Sevilla. Ha sido un
pleno urgente y extraordinario el que ha propiciado el “boicot”, como le ha llamado el portavoz del PP, Juan Bueno, de todos los grupos de la oposición, impidiendo que se aprobasen
modificaciones presupuestarias por valor de
14 millones para aspectos tan diversos como los Grammy Latinos, la segunda campaña del Bono Sevilla al comercio, pagos a la ROSS o el tranvibús a Torreblanca.
El pleno se convocó apenas
24 horas antes, con expedientes que superaban los
200 folios y con
modificaciones presupuestarias relevantes que habían planteado “dudas” a la oposición, que había solicitado al Gobierno del PP que no celebrara ese pleno urgente, que lo pospusiera como un
pleno extraordinario e incluso que trasladaran esas aprobaciones
al pleno ordinario de octubre. Al final, tras el bloqueo, el Gobierno ha convocado uno
nuevo y extraordinario para el próximo martes.
Los tres grupos, de una u otra forma, coincidían en que los asuntos
no requerían esa urgencia y la oposición le afeaba las “formas” al PP, absteniéndose en la votación para aprobar esa vía de urgencia, dejando al Gobierno local ante su
primer “fracaso” en la Casa Grande, lo que provocaba la
“sorpresa mayúscula” del portavoz popular, Juan Bueno, que ya había intentado justificar la rapidez de la convocatoria puesto que tenían que aprobarse
“sin remedio ninguno”, más aún tras el parón del ciberataque, y evitar” perjuicios a la ciudadanía”.
La primera en tirarle de las orejas al Gobierno municipal era la portavoz de
Con Podemos-IU, Susana Hornillo, criticando que se promoviera una modificación “de muchos millones con menos de 24 horas" de antelación, "200 páginas" imposibles de "evaluar". Posteriormente, criticaba que el Gobierno local está “totalmente
desnortado que no termina de hacerse con las riendas de la ciudad, porque Sevilla le viene grande”. Para Hornillo, “en democracia las formas son tan importantes como el fondo” y anunciaba que, ante esta forma de hacer política, a ellos lo que les invita es a “hacer una oposición aún con más fuerza”.
También denunciaba el “abuso” de las urgencias la portavoz de
Vox, Cristina Peláez, coincidiendo completamente Con Podemos con las críticas a la falta de tiempo. Tras el pleno, Peláez ha criticado que el alcalde, José Luis Sanz, pretenda que la oposición
"trague con ruedas de molino", sobre todo con modificaciones presupuestarias de tanto calado, que ellos apoyaran si es de interés para la ciudadanía, recomendando al PP que "
tome nota de lo ocurrido y actúe en consecuencia para evitar sucesivas derrotas plenarias, bastante previsibles y que están por venir si mantiene su total falta de diálogo con los grupos políticos".
También ha criticado la portavoz adjunta del
PSOE, Sonia Gaya, que el Gobierno local no haya hablado con la oposición cuando era lógico que tuviera "dudas razonables" que consultar y la necesidad de analizar detenidamente la documentación, porque “el procedimiento importa”. “El Gobierno tiene que entender que
si no tiene mayoría absoluta para gobernar, tiene que contar con los grupos de la oposición”, le recomendaba posteriormente, apuntándole que “tienen que hacer un poquito de más esfuerzo para trabajar con todos”, reiterando que apoyarán las cuestiones que sean de interés para la ciudad.
Frente a esa postura, Bueno defendía que
los expedientes "no son tan difíciles" de analizar pero cargaba especialmente contra
Vox, que le daba la "absoluta sorpresa" con su abstención al
"aliarse con la izquierda por sus propios" intereses políticos en lugar de apoyar al Gobierno local del PP, con el que pretende cogobernar.
Y de
"mayúscula sorpresa" calificaba la actitud del
PSOE, al que acusaba de
abusar “permanentemente” de esta fórmula durante sus años de gobierno, un " boicot" lo llamaba, culpando a los socialistas de querer "que la ciudad siga con tiempos lentos y horrorosos" para "poner palos en la rueda" al Gobierno local del PP, pensando sólo "en su rédito político".
Tras el pleno y en un comunicado, el PP lamentaba que PSOE, Podemos y VOX
"hayan puesto sus intereses por encima de los de Sevilla y pretendan bloquear la ciudad". El Gobierno volverá a intentarlo el
próximo martes en un pleno extraordinario, ya que hay asuntos que urge aprobar cuanto antes, han adelantado.
Así el portavoz del Grupo Popular, Juan Bueno, ha manifestado que “los grupos políticos
no han tenido hoy altura de miras con la ciudad y han impedido
agilizar y acelerar trámites para, por ejemplo, realizar una segunda campaña de bonos de consumo, realizar una aportación a Lipasam para gastos de alquiler de camiones, pagar los gastos restantes para la gala de los Grammy o para la aportación económica a la ROSS, entre otros asuntos”. Ha añadido que “están
boicoteando a Sevilla y a los sevillanos, bloqueando la ciudad así como poniendo en peligro algunas ayudas, cuyos pagos se verán ahora retrasados”.
“El PSOE quiere que este Gobierno
siga actuando con los tiempos que ellos imponían a la ciudad, tiempos lentos, terroríficos y horrorosos para prestar un buen servicio a la ciudad y que bloquean a Sevilla”, ha detallado. Ha recordado que “llama la atención cuando el PSOE es un partido que cuando ha gobernado ha abusado totalmente de los plenos extraordinarios urgentes y, en este caso, se trata de un claro boicot a Sevilla y a los sevillanos apoyado por el resto de partidos”.
"Los grupos políticos al no permitir esta modificación presupuestaria
han puesto en peligro que pueda haber bonos consumo, quieren que Sevilla siga estando sucia, se han opuesto a una modificación presupuestaria que adelanta, y mucho, el problema de suciedad que tiene la ciudad. No han pensado en los sevillanos, han pesado en su rédito político, es una irresponsabilidad”.