El sevillano Vita, un entrenador curtido en mil batallas en la provincia de Sevilla, estaba muy ilusionado con afrontar en el Rayo Sanluqueño la temporada 2020-2021 en la Segunda Andaluza. Pero los últimos acontecimientos le hacen dudar hasta el punto que ha resaltado que “no sé cuando podremos empezar la Liga. Temo que lo hagamos en el mes de enero y este parón será muy largo porque estaremos condicionados por los brotes que están apareciendo. Si no se juega por la pandemia es lo más lógico y ante todo está la seguridad de todo el mundo”.

El equipo rayista había estado entrenando a nivel particular con la presencia de unos 20 jugadores en el Doro Stadium y como dice el veterano y experimentado entrenador hispalense “para vernos una vez a la semana. También habíamos realizado unas pruebas físicas en La Calzada”.

Resalta que “llevo 25 años entrenando y nadie pensaba que en el 2020 ibamos a ver a la gente con mascarillas por la calle. Esta pandemia se ha llevado a mucha gente por delante, a muchos mayores pero la juventud puede ser la bomba a partir de ahora. La solución pasa por encontrar una vacuna aunque no creo que sea tan rápida”.

No obvia que “estamos hablando de un tema bastante complicado porque lo que está pasando no es normal. Hay que acostumbrarse a esto, a unas normas que debemos cumplir. El virus está ahí, no sé si adrede o porque es espontáneo”.

Entiende que “hay mucha gente que no quiere que el fútbol pare, por ejemplo en las Escuelas”.

El Rayo Sanluqueño ha tenido tres entrenadores en un periodo de un año. Rubén Pérez Herrera, que se ha comprometido con el Cruz Roja de Jerez,  inició la 2019-2020, le suplió Nani, que firmó por el Antoniano B, y de cara a la 2020-2021 el encargado de dirigir al equipo de la Ciudad de la Manzanilla.

Asegura que “he cogido al Rayo Sanluqueño con la máxima ilusión. No sé cuando podremos empezar la pretemporada. He cogido a un equipo con mis ideas y pienso que si la normalidad regresa podemos estar luchando por pelear en la zona de arriba”.

Y avisa que “utilizaremos un terreno de juego que es de césped natural y que pisan varios equipos. Eso puede ser perjudicial”.

Analiza lo siguiente: “Tendré jugadores que como es lógico no cobrarán. Quiero compromiso porque el problema puede estar si no hay jugadores suficientes para entrenar porque si es así no vuelvo. Quiero pasarlo bien al igual que mis jugadores”.

Vita reside en Sanlúcar y asegura que “en esta ciudad me encuentro muy  gusto. También he residido varios años en Chipiona”.