Está en contacto con el Gobierno de Venezuela y con representantes de la oposición para insistir en la necesidad de calma y buscar una solución política
Naciones Unidas está en contacto con el Gobierno de Venezuela y con representantes de la oposición para insistir en la necesidad de calma y buscar una solución política a la crisis en el país, aseguró este miércoles la organización.
El secretario general de la ONU, António Guterres, mantuvo en la noche del martes una conversación con el ministro de Exteriores venezolano, Jorge Arreaza, mientras que funcionarios de Naciones Unidas contactaron con "personas que trabajan con el presidente de la Asamblea Nacional", el opositor Juan Guaidó, explicó el portavoz Stéphane Dujarric.
Según Dujarric, Guterres "reitera su llamamiento a todas las partes para que ejerzan máxima moderación y advierte frente al uso de la fuerza letal contra manifestantes pacíficos".
"Nuestra preocupación está con los venezolanos y en intentar encontrar una solución pacífica a la actual crisis", insistió el portavoz.
Dujarric afirmó que a la organización le preocupan los informes que apuntan a numerosas personas heridas y a una muerte durante las protestas del martes y manifestó que se siguen de cerca las manifestaciones convocadas durante esta jornada.
El portavoz no quiso entrar a responder al embajador venezolano ante la ONU, Samuel Moncada, quien la víspera criticó a Guterres por mostrarse "imparcial cuando hay un Gobierno reconocido en Naciones Unidas", el de Nicolás Maduro, y "se hizo un intento de derrocarlo".
Preguntado por la situación del dirigente opositor Leopoldo López, Dujarric dijo que para Naciones Unidas es "importante que las personas sean libres para manifestarse pacíficamente y que no se haga nada que complique aún más el proceso político".
López, que cumplía una pena de casi catorce años de prisión en régimen de arresto domiciliario, fue liberado con un "indulto presidencial" de Guaidó, reconocido como presidente encargado por más de cincuenta países.
El opositor se encuentra actualmente en la residencia del embajador de España en Caracas, pero por el momento no ha pedido asilo político.
Venezuela vive este miércoles una nueva jornada de manifestaciones, veinticuatro horas después del efímero levantamiento de un grupo de militares en Caracas que desató una jornada de protestas violentas.