"El piloto chino tomó medidas profesionales y estándar de acuerdo con las leyes y reglamentos"
El avión estadounidense que se vio envuelto recientemente en un incidente con un caza chino en el Mar de China Meridional "puso en peligro" la seguridad de los pilotos del Ejército chino, aseguró este sábado el Ministerio de Defensa del país asiático, que acusó a EEUU de "confundir deliberadamente".
Este jueves, el Ejército estadounidense condenó que un avión de combate chino J-11 se aproximase hasta una distancia de tres metros de un avión de reconocimiento del país norteamericano en una confrontación sucedida el pasado 21 de diciembre.
"Estados Unidos hizo caso omiso de la verdad y su declaración es una pura calumnia y exageración", declaró este sábado el portavoz del Ministerio de Defensa chino Tian Junli, que agregó que Washington "confunde deliberadamente a la opinión pública internacional"
La cartera castrense compartió un vídeo en el que se ve a los dos aviones a una distancia muy reducida.
Según el Ministerio, el avión estadounidense realizaba "un reconocimiento intencional de la costa sur de China y las islas Xisha (también conocidas como islas Paracel)" y, pese a "múltiples advertencias chinas", alteró "repentinamente" su rumbo, "poniendo en peligro la seguridad del vuelo del aeroplano chino" y "violando leyes y prácticas internacionales".
"El piloto chino tomó medidas profesionales y estándar de acuerdo con las leyes y reglamentos", aseveró Tian.
El portavoz del Ministerio de Asuntos Exteriores de China Wang Wenbin pidió este viernes a Estados Unidos que "detenga sus peligrosas provocaciones y deje de desviar la culpa" hacia Pekín.
Filipinas, Vietnam, Malasia, Taiwán y Brunéi reclaman partes del Mar de China Meridional, por el que circula el 30 % del comercio global, además de albergar yacimientos de petróleo y gas, mientras que China reclama la soberanía de estas aguas en su totalidad.
La tensión ha aumentado en los últimos años con altercados, acusaciones cruzadas entre los gobiernos reclamantes y un aumento de la presencia militar en la zona por parte del Ejército chino.
Washington acusa a Pekín de "coaccionar e intimidar" a los países del área y califica de "ilegales" sus reclamaciones territoriales, poniendo énfasis en fallos como el del Tribunal de La Haya a favor de Filipinas en 2016 por la disputa de un atolón en aguas de ese mar.