Más de 30 agentes de policía y 20 cámaras para vigilar las luces de una navidad atípica

Unas veinte cámaras de alta definición, más de treinta agentes de la Policía Local y Cuerpo Nacional de Policía y doce voluntarios de Protección Civil blindan las luces de la emblemática calle Marqués de Larios malagueña en una Navidad atípica, cuando se recibe una gran afluencia de público por la iluminación espectacular.

Los agentes velan por el cumplimiento de las normas en un lugar donde cientos de visitantes se sitúan a la entrada de la calle –en la que no hay espectáculos de luces este año- para el tradicional visionado de la iluminación o posado ante la cámara en el primer fin de semana en el que se abre la movilidad entre municipios andaluces.

Por otra parte, el Centro Municipal de Emergencias supervisa con 20 cámaras 4K cada rincón de la conocida vía con un plano aéreo para controlar de forma precisa si realmente hay aglomeraciones o si depende del ángulo fotográfico, según ha explicado a Efe el edil de Seguridad de Málaga, Avelino Barrionuevo.

Ante el posible aumento de visitantes en los próximos días debido a la flexibilización de las normas –ya que a partir del 17 se abrirá la movilidad entre provincias andaluzas-, el Ayuntamiento prepara nuevas medidas, entre las que se encuentra el “cierre momentáneo” de las calles que conectan con Larios o el vallado de la céntrica vía.

Alrededor de las 20 horas de este sábado se colocaron estas estructuras metálicas en la entrada de la vía para controlar el paso de los viandantes, lo que en palabras de Barrionuevo responde a un “simulacro” de lo que se haría para evitar masificaciones, para lo que también se ha decidido el encendido del alumbrado a una hora aleatoria.

Ya lo advirtió el presidente de la Junta de Andalucía, Juanma Moreno, con la frase “estas Navidades van a ser distintas a las del año pasado”, una idea que ha repetido en los últimos meses y que se ha confirmado tras el encendido de las luces el 27 de noviembre.

Barrionuevo ha manifestado a Efe que, tras el 17 de diciembre, se “incrementará” el número de efectivos y se estudiarán medidas adicionales a las ya tomadas como el cierre del árbol de los deseos –que se encuentra al final de la calle-, donde se aglomeraban personas en su interior, y la supresión de actividades lúdicas en la vía.

El concejal declara que “no hay ningún riesgo si la gente transita y no está parada”, por lo que se vela por la “fluidez” de los visitantes y en el caso en el que no existiera ésta y se formara una gran afluencia un inspector ordenaría estas medidas de cortes de acceso a la vía.

“No podemos poner un policía en cada esquina”, ha mencionado Barrionuevo, que ha apelado a la responsabilidad individual de los ciudadanos y ha elogiado el papel “proactivo” de los agentes de seguridad en el cumplimiento de las normas, que denuncian a una media diaria de “entre ochenta y cien personas” por no usar mascarilla.

El edil ha insistido en que el día del encendido del alumbrado navideño “no hubo aglomeraciones” y ha destacado la importancia de las luces de calle Larios para “incentivar” el consumo o la restauración -“uno de los sectores más castigados”-, “lógicamente” con el correcto cumplimiento de las medidas sanitarias.