El concejal socialista que denunció en Madrid que en Estepona (Málaga) se estaban cometiendo delitos relacionados con la corrupción, David Valadez, ha asegurado este miércoles en el juicio por el caso Astapa que el comisario José Manuel Villarejo no tiene ninguna vinculación con el origen del procedimiento.
Valadez, que ha declarado en calidad de testigo en la Audiencia Provincial de Málaga, ha lamentado que algunas defensas de distintos acusados hayan intentado señalar alguna vinculación de Villarejo con el caso Astapa y ha subrayado que lo han hecho "para desviar la atención".
Las defensas aseguraron en la fase de cuestiones previas que Villarejo había manipulado la instrucción del procedimiento porque tenía intereses inmobiliarios en dicho municipio y que, por tanto, se habían vulnerado los derechos fundamentales de los acusados.
David Valadez fue proclamado alcalde en julio de 2008 tras estallar el caso Astapa y producirse el ingreso en prisión de Antonio Barrientos, y ha relatado que en ese momento no conocía al comisario, que fue mucho después cuando un párroco de una iglesia de Estepona le dijo que tenía un hermano policía.
"Quedé con Villarejo para tomarme un café cuando ya era alcalde, al igual que lo hice con otras muchas personas, pero insisto, cuando yo ya era alcalde", ha reiterado Valadez.
"No hubo ninguna injerencia, intromisión de Villarejo en el caso Astapa, no lo conocía. Además la denuncia la pusimos Cristina Rodríguez y yo el 16 de noviembre de 2006 en Madrid, ante la Unidad de Delincuencia Económica y Fiscal (UDEF) del Cuerpo Nacional de Policía", ha agregado.
Preguntado por el fiscal Anticorrupción sobre el motivo de que pusiera la denuncia en Madrid en vez de Estepona, ha asegurado que lo hicieron allí porque estaban "hartos de denunciarlo en todos los niveles de nuestro partido sin que se nos hiciera el más mínimo caso".
Ha relatado que celebró innumerables reuniones para denunciar la política de contratación que se hacía en el Ayuntamiento y que su compañera y él "constataron durante cuatro años que todas las actividades vinculadas a asociaciones deportivas, colectivos sociales, hermandades y asociaciones vecinales se financiaban con dinero procedente del urbanismo que se pagaba en metálico al margen de la fiscalización del ayuntamiento".
"No pasaba ninguna cuantía económica por los filtros que existen en una corporación municipal", ha advertido, "no había fiscalización por parte del interventor ni por el tesorero, nosotros comprobamos cómo llegan unas elecciones municipales y aquello es una feria, sin que se sepa cuál es la fuente de financiación".
Ante esta situación Rodríguez y Valadez optaron por dirigirse a la capital española porque "era obvio que si acudíamos al juzgado de instrucción o a la Comisaria Nacional de Policía de manera inmediata se filtraría la existencia de esta denuncia y se abortaría cualquier investigación", ha manifestado.
"Jamás he recibido consejos, presiones e influencias de nadie, yo fui quien me puse en contacto con la policía para poner en conocimiento los hechos que estaban ocurriendo", y ha reiterado que "Villarejo y yo no maniobramos una trama en el 2006 para que yo concluyese como alcalde".
Ha relatado que tanto su compañera de partido como él valoraron mucho denunciar los hechos: "teníamos aprecio a nuestras vidas y sabíamos que iba a haber un perjuicio para nosotros como lo hubo, pero optamos por denunciar", ha recalcado, al tiempo que ha reconocido que a día de hoy quizás no hubiera denunciado.
En un momento de su intervención, Valadez ha pedido al Tribunal que "por favor" el procesado, el exalcalde Antonio Barrientos, no le insultara porque le estaba diciendo "mentiroso y embustero".