El sindicato Agrupación de los Cuerpos de Administración de Instituciones Penitenciarias (Acaip) denunció ayer un nuevo caso de agresión a un funcionario -en este caso con resultado de heridas de carácter leve- ocurrido en el centro penitenciario de Botafuegos.

Los hechos tuvieron lugar el pasado domingo, alrededor de las 16.00 horas, en el módulo 15 del penal, y el responsable fue un recluso en primer grado penitenciario que, tal y como reconocieron fuentes del propio recinto penitenciario, se había mostrado como “conflictivo”.

Según el relato de los hechos ofrecido por Acaip, el interno “comenzó a golpear violentamente la puerta de la celda, a destrozar la ventana de la misma y demás efectos integrantes de ésta”. Al mismo tiempo, y siempre según esta versión, el reo comenzó a amenazar con matar a los funcionarios que prestan servicio en este departamento.

Actuación
Un grupo de entre tres y cuatro funcionarios, según confirmaron desde la dirección del centro, además del jefe de servicio, se personaron inmediatamente después en la celda del individuo con la intención de “hacer entrar en razón” a este individuo. Acaip continuó el relato afirmando que a pesar de esta medida “no sólo no depuso su actitud, sino que además acrecentó su estado de excitación”.

Cuando accedieron los funcionarios a la celda, el interno esgrimió dos trozos de cristal de la ventana rota y, usando calcetines como mangos, intentó cortar a los trabajadores. Ante esta situación, se vieron obligados “a inmovilizarle y trasladarle a otra celda más adecuada a su estado”. Acaip reveló que un funcionario resultó lesionado durante el forcejeo con una herida inciso-contusa en la cara, debiendo ser atendido por los servicios médicos.

Desde el sindicato precisaron que el presunto agresor es “un recluso clasificado en primer grado,  condenado por varios delitos y reincidente en este tipo de acciones”. En este sentido, recordaron que hace menos de dos meses, “dicho interno protagonizó otro incidente en el mismo departamento, en el que arrancó la maniqueta de la ventana, elaboró un pincho de fabricación casera y, con unos calcetines rellenos de cristales obtenidos por la rotura de otra ventana, atacó igualmente a los funcionarios del Centro.

El director de la prisión, Francisco Márquez, comunicó que el reo está pendiente de traslado al centro penitenciario de Córdoba sólo a la espera de su comparecencia en un juzgado de Algeciras, prevista en estos días.

Acaip agregó en su nota informativa de ayer que “en los últimos meses han sido casi una decena” los funcionarios heridos por agresiones de internos en el centro “en reiteradas ocasiones”. El director, Francisco Márquez, calificó de “falsos” estos datos, si bien reconoció que en el recinto se producen situaciones de conflictividad como en cualquier centro carcelario.

El sindicato cree que todo lo ocurrido “denota la poca formación en materia de defensa personal que poseen la mayoría de los trabajadores de Instituciones Penitenciarias”, los cuales “en determinadas ocasiones, se ven obligados a resolver conflictos como el expuesto” sin estos conocimientos fundamentales, en especial “teniendo en cuenta que un elevado número de internos extranjeros forman parte de grupos organizados extremadamente violentos y con formación militar”. Márquez no quiso entrar en competencias formativas que le son ajenas, si bien quiso dejar claro que “hay quien reivindica que un funcionario de prisiones se convierta en ‘Rambo’ y se pasee con pistolas y otras armas por las cárceles”.