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Agaden denuncia "graves daños" por obras en el parque de Los Alcornocales

El colectivo solicita la destitución del director conservador del parque y de la delegada provincial de Medio Ambiente

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El colectivo ecologista Agaden denuncia el “grave y dañino atentado” que se está realizando estos días en el espacio natural protegido de El Valle de San Carlos del Tiradero, en el parque de Los alcornocales.

Asimismo, la asociación considera que “la culpa de la situación es de la administración del parque con su director como responsable y la Delegada provincial de Medio Ambiente, Gemma Araujo, como cómplice de este desastre continuado y repetido por segunda vez en menos de diez años”.

Agaden no entiende “la poca o nula previsión de la administración andaluza, al autorizar en un plazo de diez años dos obras iguales por el mismo espacio protegido y de daños más que cuantiosos ambientalmente hablando”.

“Ante este hecho sin precedentes, vamos a solicitar la destitución del director conservador del parque por no proteger este espacio y por permitir una serie de atropellos y de daños ambientales como es el caso de la apertura de una brecha en el parque desde la zona del pantano del Almodóvar, en el municipio de Tarifa, hasta la venta del frenazo, en la ciudad de Los Barrios, afectando a más de quince kilómetros. Además, la anchura de la herida varía de varios metros hasta los diez o quince metros”, manifestó el colectivo.

Por otro lado, Agaden denuncia que “en la obra se están podando y talando cientos de árboles y especies forestales protegidas como acebuches, alisos, alcornoques, lentisco. espino albar y hojaranzo, entre otras”.

Según explica la asociación “también se ha alterado y variado puntualmente el curso del agua de al menos cinco o seis canutos con la vegetación de laurisilva. Estos arroyos se han tapado con zahorra, yendo la misma al arroyo de San Carlos del Tiradero o pantano de Almodóvar. Además, entre otras cosas, se ha sepultado y colmatado la vegetación existente con los rellenos”.

Por último, Agaden termina denunciando la “alteración de los ecosistemas de la zona y el poco o nulo respeto por parte de la empresa encargada de la obra hacia el medio natural que es tan frágil”.

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