La
sexta ola ha perdido definitivamente toda su fuerza en
Jerez tras mes y medio de vértigo. Desde el 14 de diciembre, fecha en la que los contagios diarios empezaron a superar los dos dígitos, hasta esta semana, en que han vuelto a los dos, la ciudad ha atravesado uno de los momentos más delicados de la
pandemia, al menos en lo que a la rápida transmisión del virus y la multiplicación de
positivos se refiere. Ya hace unas cuatro semanas que pudimos dar por superado el pico de la ola "que nadie vio venir", y este miércoles nos encontramos con que todos los parámetros que ayudan a interpretar la evolución de la presencia del virus en nuestras vidas marcan de nuevo tendencia a la baja, incluida la presión hospitalaria.
Primer dato: los nuevos
contagios. La Consejería de Salud ha comunicado en las últimas 24 horas 81, 16 menos que el día anterior. Según dato: las
personas curadas en el mismo periodo de tiempo. Han sido 249. Tercer dato: no hay que lamentar más
víctimas mortales. Cuarto dato: como consecuencia de todo lo anterior, los
casos activos siguen en retroceso y se sitúan en 5.099, casi 800 menos que hace una semana.
Y el dato que determina la incidencia del virus en la ciudad: la
tasa covid. Ha vuelto a descender, hasta los 654 casos por cada cien mil habitantes, 52 puntos menos que el día anterior. Además, el acumulado de casos de esta última semana se eleva a 511, frente a los 1.393 de los últimos 14 días, que también reflejan la evolución descendiente de casos.
Pero, especialmente, el dato que hoy reporta más alivio es el de la
presión asistencial. El número de pacientes hospitalizados se reduce a 60, ocho menos que el día anterior. 52 de ellos siguen en planta y 8 en la UCI. Por su parte, las bajas entre profesionales sanitarios, casi un centenar menos que hace una semana, se mantienen en 122.