La tercera velada de teatro clásico de la actividad 'Si las padres hablasen' del programa 'Jaén Genuino. El pasado sí tiene futuro' hizo reír este sábado al público que llenó el patio de armas del Castillo de Santa Catalina para disfrutar de la adaptación de 'El Lazarillo de Tormes' de la compañía 'La Paca'.
Con las 200 butacas ocupadas por un público familiar, al escenario subieron sólo dos actores, que convirtieron el gran clásico de la literatura española del siglo XVI en una obra divertida, manteniendo intacta su frescura, fuerza y su vigencia.
El escenario, con la Torre del Homenaje de fondo, lo llenaron los actores Juan Carlos Aceituno en el papel del Lazarillo; y Pedro Jiménez, en los papeles de los diferentes amos a los que prestó servicio el protagonista de una novela picaresca, que es esbozo irónico y despiadado de la sociedad del momento, en la que se muestran sus vicios y actitudes hipócritas. El falso sentido del honor y de la hipocresía se representó en clave de humor, con la dramaturgia de Tomás Afán, co-director de La Paca.
Las miserias del Lazarillo de Tormes, desde su infancia hasta su matrimonio en edad adulta, llenaron la genuina noche del sábado de picaresca. En diferentes escenas, un Lazarillo narrador y protagonista de su historia a través de los recuerdos; y los personajes del ciego, el clérigo, el escudero, el buldero y la esposa del Lazarillo, entretuvieron a un público entregado con actores que bajaron del escenario para hacer partícipe al espectador, al que arrancaron carcajadas. Especialmente la escena de la experiencia del Lazarillo de Tormes con el escudero.
El programa 'Jaén Genuino. El pasado sí tiene futuro' está impulsado por VIVA JAÉN y patrocinado por la Diputación Provincial, la Junta de Andalucía, el Ayuntamiento de Jaén, la Caja Rural y la colaboración de Gráficas La Paz y Zoco Word.
