El tiempo en: El Puerto
Publicidad Ai
Publicidad Ai

Huelva

¿Dónde están las llaves?

El entrenamiento del primer equipo empezó casi 45 minutos tarde porque no podían acceder a la Ciudad Deportiva

Publicidad Ai
Publicidad AiPublicidad Ai Publicidad AiPublicidad Ai
Publicidad AiPublicidad Ai
Publicidad Ai
Publicidad Ai Publicidad Ai
  • Ciudad Deportiva Recre -

Lo que no pase en el Decano no pasa en ningún sitio. El suceso que se ha vivido este lunes en las puertas de la Ciudad Deportiva define el momento de confusión y trastorno que sufre el club onubense.

Los jugadores del primer equipo y el cuerpo técnico del Recreativo de Huelva se encontraron las puertas de la Ciudad Deportiva cerradas, debido a la huelga iniciada la pasada semana por los trabajadores del club y de la Fundación Recre. 

Estaban citados a las 17.00 horas, pero nadie podía entrar en el interior del recinto. Alrededor de las 17.15 horas, el técnico Juan Manuel Pavón pidió a los medios de comunicación allí congregados que se alejarán para mantener una reunión con sus futbolistas. Ahí, el preparador onubense instó a los jugadores a que se hicieran cargo de sus utensilios personales y que se lavaran sus propias prendas mientras que la huelga de los empleados siga adelante.

Poco después, curiosamente aparecieron las llaves y entre Jesús Vázquez, capitán albiazul, y Pavón, abrieron las puertas de la Ciudad Deportiva. Entonces, sobre las 17.30 horas, aparecieron Manolo Zambrano, presidente del Recre, y Roberto Sánchez, miembro del consejo de administración por el colectivo de aficionados Recre Trust, y mostraron su “preocupación” a los periodistas por la que consideran “la peor etapa de toda la historia del club”.

Así pues, el primer entrenamiento después de las vacaciones de Navidad se inició con casi 45 minutos de retraso y un gran desconcierto por la situación vivida. Y como no podía ser de otra forma, el entrenamiento se llevó a cabo a puerta cerrada.

Más allá de estos incidentes, la vuelta al trabajo vino marcada por las ausencias del defensor Ubay Luzardo y del delantero Iván Aguilar. Ambos disfrutaban de un  permiso del club.

Eso sí, la huelga de los empleados incluye al personal no deportivo y al deportivo. Por lo que los futbolistas del primer equipo no contarán con cuerpo médico mientras dure la huelga. El Recreativo, al competir en Segunda división B, no tiene la obligación de disponer de médico durante las sesiones de entrenamiento, pero a la vista está que no es lo más adecuado.

Un nuevo capítulo de la realidad del club más antiguo del país, que debilita su imagen y que cuenta con difícil solución.

TE RECOMENDAMOS

ÚNETE A NUESTRO BOLETÍN