El Partido Popular (PP) y el Partido Socialista (PSOE) están casi estancados en los resultados que obtuvieron en las pasadas elecciones generales del 20 de diciembre, según una encuesta realizada por Advice Strategic Consultants con 2.500 entrevistas, pero el partido de Mariano Rajoy amplía la ventaja sobre el PSOE a 7,4 puntos, al haberser producido una ligera subida de su partido y una leve bajada de los socialistas.
Los datos de esta encuesta fueron recogidos entre los días 4 y 10 de abril mediante la realización de 3.800 entrevistas, de las que se consideraron válidas 2.500 y mediante una distribución proporcional en 129 municipios de 48 provincias, repartidas por las 17 CCAA.
Las entrevistas se realizaron a teléfono fijo con una proporción del 38 por ciento de teléfonos móviles. El margen de error es de más menos 2 por ciento para el conjunto de la muestra.
Según estos datos, a los que ha tenido acceso Europa Press, el partido de Mariano Rajoy gana tan sólo 4 décimas más que el 28,7 por ciento registrado en las generales de hace tres meses y medio, que le granjearon 123 escaños en el Parlamento, situándose ahora en el 29,1 por ciento del apoyo de los españoles.
El PSOE, por su parte, no logra el 22 por ciento que obtuvo el pasado 20 de diciembre, lo que le proporcionó 90 diputados en el Congreso, pero se acerca mucho a ese porcentaje al situarse en el 21,7 por ciento.
Estos datos reflejan que ambos partidos permanecen prácticamente estancados en los resultados que registraron en las últimas elecciones generales ya que los datos reflejan que sólo se han movido unas décimas arriba o abajo.
Esto indicaría que los ciudadanos que les apoyaron el pasado 20D casi no les han pasado factura por el fracaso en la formación de Gobierno, pero también refleja que ambos partidos tampoco han logrado una remontada con sus actuaciones durante estos tres meses y medio.
No obstante y a pesar de que las variaciones son mínimas, lo cierto es que al producirse un pequeño aumento de apoyos al PP y una leve bajada de los del PSOE la ventaja que ya tenían los populares se agranda en 0,7 puntos y pasa de ser de 6,7 a 7,4 puntos de diferencia.
Quienes sí experimentan cambios en este estudio sociológico son Podemos, Ciudadanos e Izquierda Unida, mientras que los nacionalistas catalanes se han dejado unas décimas en este periodo.
El partido de Pablo Iglesias acusa un desgaste de 3,1 puntos en relación con los votos logrados el pasado 20 de diciembre. En aquella fecha apoyaron a la formación morada el 20,7 por ciento de los sufragios, mientras que la encuesta realizada por Advice Strategic Consultants refleja que si se votara ahora lograría, Podemos lograría un 17,4 por ciento.
La evolución de Ciudadanos e Izquierda Unida sin embargo va en sentido contrario. Los votantes del partido naranja habían aumentado en estos casi cuatro últimos meses en 2,1 puntos, al pasar del 13,9 por ciento logrado el 20D a un 16 por ciento.
El partido que lidera Alberto Garzón también ha visto crecer sus apoyos a lo largo de este periodo desde la celebración de las elecciones generales. Según el citado estudio sociológico, Izquierda Unida lograría el 5,5 por ciento de los votos, frente al 3,7 del 20D, es decir, tendría 1,8 puntos más de apoyo.
En el caso de los partidos nacionalistas, el PNV se mantene clavado en el 1,2 por ciento del electorado. Pero ERC y Democracia y Libertad han perdido algunas décimas. Los republicanos catalanes pasan del 2,4 por ciento de las generales de 2015 a un 2,3 y la antigua Convergencia pierde dos décimas y se sitúa en el 2 por ciento.