La asociación de vecinos Cádiz Centro recibía este lunes la respuesta a las alegaciones que presentaron para evitar que la carpa de Carnaval se instale en el Muelle Ciudad. La conclusión es que han sido desestimadas por los técnicos de Contratación, por lo que la única opción que tienen los vecinos ahora es interponer un recurso de reposición ante el alcalde de la ciudad, José María González, en el plazo de un mes; o directamente un recurso en el juzgado de lo contencioso. En concreto, avocan la competencia delegada en la Junta de Gobierno como órgano de contratación y desestiman “íntegramente las alegaciones presentadas por María Luisa Campos, como presidenta en funciones de la entidad vecinal”.
Tanto es así que confirman “los pliegos de cláusulas administrativas y prescripciones técnicas para la licitación de la autorización de la explotación de las carpas de Carnaval, aprobados en diciembre”.
Para justificar por qué se echan para atrás las alegaciones presentadas por la entidad vecinal, se adjuntan informes de la Policía Local y el Negociado de Control y Disciplina Urbanística, en relación con la contaminación acústica, así como normativa autonómica donde, por ejemplo, “se engloba a la carpa en el tipo 3: establecimientos de pública concurrencia, donde los equipos de reproducción o amplificación sonora pueden generar niveles superiores a 90 dBA con un nivel máximo de emisión de 111 decibelios".
No obstante se le obligará a la empresa adjudicataria a que “presente un estudio que garantice la menor repercusión del sonido en la ciudad donde incluirá la obligación de orientar los altavoces hacia el mar y en ningún caso podrá sobrepasar los 105 decibelios”.
Una medida, que según la respuesta a los vecinos, va destinada a la protección de los derechos de los residentes, a la vez que se marca el horario hasta las seis de la mañana, excepto viernes, sábados y vísperas de festivos que tendrán una hora más.