“Es una tortura”, “no se puede dormir porque la cama vibra toda la noche”, “nos tenemos que ir de Cádiz y gastar 20 euros por cabeza porque es imposible descansar”. Se llamaron a ellos mismos “exiliados de Cádiz” y “no solo somos personas mayores las que sufrimos esta situación”. Estas son algunas de las impresiones que hicieron públicas algunos de los vecinos que están afectados por la instalación de la carpa de Carnaval en Muelle Ciudad.

La asociación Cádiz Centro  convocaba en la tarde del jueves a los vecinos para informarles de las gestiones que han venido realizando ante el Ayuntamiento y las medidas a tomar en las próximas fechas, puesto que la carpa se supone que debe inaugurarse el mismo jueves de la Final del Concurso de Carnaval en el Teatro Falla.

En el encuentro se repasaron las reuniones con el equipo de Gobierno y con los técnicos, así como con la Autoridad Portuaria. Se habló sobre la mesa de contratación que suspendía el proceso de adjudicación de la carpa, para así contestar a las alegaciones presentadas por los vecinos. La mayoría de los requerimientos vecinales hacían incidencia en el volumen de la música y en la jurisprudencia existente en relación a la contaminación acústica.

Como ejemplo, los afectados explicaron que “llegamos a medir el volumen de la música con una aplicación de móvil, con las ventanas -de Climalit- cerradas”, ante el requerimiento que realizaron a la Policía Local de que fuera  hacer una volumetría y rechazaran “nuestra petición porque estaban en Carnaval, muy saturados y no podían acudir a nuestro requerimiento”.

Asimismo, también pusieron de manifiesto durante la reunión que agentes policiales “se negaron a recoger  nuestras denuncias porque esos límites de horas y decibelios estaban tolerados”, por eso no constan denuncias por ruido en el Ayuntamiento. Sin embargo, durante el primer año de la carpa, una de las familias asistentes sí que pudo poner una denuncia por los ruidos. En la reunión se aconsejaba que si no toman nota de las denuncias los agentes de la Policía se haga un escrito informando de los hechos.  

Insistieron que no están en contra del Carnaval. “Por ejemplo, los tablaos tienen todos los días actuaciones hasta las dos y media de la mañana, pero sabemos que a partir de esa hora vamos a poder descansar”.

“Partimos de un engaño, porque nos dijeron que no era posible el cambio de ubicación sin ni siquiera haberlo estudiado”. El colectivo vecinal no está parado y se ha puesto en contacto con otras asociaciones de vecinos a nivel nacional para informarse de casos similares y aprovechar su experiencia. 

Tanto Marisa Campos como Francisco Gómez, de Cádiz Centro, confían en que David Navarro, concejal de Patrimonio,  cumpla y responda a las alegaciones presentadas.  En el acto había representantes de la Federación 5 de Abril, Ciudadanos y PP.