Casi dos meses después de la reunión del alcalde, Bruno García, con los portavoces de los partidos de la oposición, para abordar el borrador de presupuestos para 2024, aún no han tenido acceso al documento completo.
El primer edil explicó que, para cuadrar los números, había que liquidar primero las cuentas del año pasado y llevar a cabo una modificación de créditos, mañana, en Pleno extraordinario.
A Óscar Torres todo este proceso le parece mal. “Lo único que recibimos fue un documento genérico con líneas de inversión” del presupuesto, ha insistido en rueda de prensa, advirtiendo, una vez más, que no se aprobarán hasta el segundo semestre, algo incomprensible, en su opinión, porque el PP tiene mayoría absoluta.
Pero también critica la liquidación, dado “que al Ayuntamiento de Cádiz le sobren más de 17 millones de euros no es motivo de celebración, como intenta hacer ver el equipo de Gobierno”.
En este punto, responsabilizada también a Adelante, que gobernó hasta mediados de año, porque “esa gran cantidad de dinero podría haber ido destinada a partidas tan sociales como vivienda, empleo o para cubrir la gran falta de personal que tiene el Ayuntamiento de Cádiz”.
Además, lamenta que el remanente de tesorería se destine ahora a amortizar deuda, con quince millones, con préstamos de hasta 15 y 20 años para pagar las obras del estadio, entre otras cosas, o el déficit de explotación del servicio de autobuses urbanos del 2022, con 1,4 millones de euros, “por no contar con un pliego de transporte” ni en el anterior mandato ni en ésta.
Para David de la Cruz, portavoz de Adelante Izquierda Gaditana, la propuesta del Pleno extraordinario “es barbaridad” porque beneficia a los bancos “en lugar de a las necesidades de la ciudad, como Valcárcel, vivienda pública o el nuevo portillo”.
Y también lamenta el retraso en la tramitación de los presupuestos con el mismo argumento de Torres: “Se va a cumplir un año con el PP en el Gobierno local y tiene mayoría absoluta…”.
