La organización andalucista de izquierdas aprovecha así esta nueva normativa para requerir al gobierno local de Germán Beardo la limitación de Viviendas Turísticas en la ciudad. “La proliferación de este tipo de negocio es la causa principal del gravísimo problema que tenemos con la vivienda en El Puerto”, aseguran desde la formación.
“Según el INE, el número de Viviendas de Uso Turístico en El Puerto era de 1029 en agosto del año pasado”, indican, y afirman que “se puede ver a simple vista cómo este número aumenta por días, por la multiplicación de cajetillas en las puertas y el incremento de carteles de empresas turísticas en nuestras calles”
“Un negocio que merma el derecho de los portuenses a la vivienda, reduciendo la oferta de vivienda en alquiler para todo el año y aumentando su precio a unos niveles completamente desorbitados para los salarios que tenemos de media en nuestra ciudad”, argumentan. “Según el portal de alquiler y venta ‘Idealista’, el precio medio para un alquiler de un piso en El Puerto aumentó un 5,3% el pasado año, superando los 660€ al mes. Esto supone más del 100% del salario para un joven portuense, impidiendo su emancipación, y más del 60% del salario de un adulto, si hablamos de términos medios, según datos del 2021, cuando los expertos economistas sugieren no gastar más del 30% del salario en la vivienda para gozar de una buena salud económica y no entrar en riesgo de pobreza”.
Adelante hace también hincapié en otros problemas derivados de esta cuestión, como son “las molestias vecinales y el vaciado de nuestro centro histórico” que, según indican, “afecta principalmente a nuestro comercio local, suponiendo el cierre de muchos de ellos y, por un lado, el abandono y deterioro de los locales y edificios, o del otro lado, la proliferación de franquicias que arrasan con nuestra esencia portuense y dejan trabajos y salarios precarios”.
De este modo, y junto con la limitación de las VUT, la organización señala otras propuestas para paliar la problemática de la vivienda, como son: “priorizar políticas de vivienda pública, apoyar las cooperativas de vivienda, ayudas económicas para particulares para restaurar las viviendas vacías, o aplicar la Tasa Turística que ya hemos propuesto en el Parlamento Andaluz”, y concluye sentenciando que “no podemos vivir solo del turismo. Si de verdad el gobierno local quiere que la ciudad crezca, tenemos que permitir que las y los portuenses vivan en ella”.
