Más de 600 corredores despidieron el año atlética y solidariamente en una edición de la San Silvestre que ha resultado todo un éxito. El concejal de Deportes, José Ignacio González Nieto, muestra su satisfacción por la masiva respuesta y el gran ambiente vivido en este evento, organizado por la Concejalía, circunstancias que garantizan la convocatoria de próximas ediciones.
La solidaridad ha obtenido un incontestable triunfo en esta actividad no competitiva pues cada uno de los atletas donó, como condición para participar, al menos un kilogramo de alimentos, preferiblemente leche, café, Cola Cao e infantiles, o bien artículos de limpieza antes de recoger su dorsal en una de las dos instalaciones de OKEYMAS en la ciudad (calle Valdés o Polígono de Las Salinas). El área subraya que, aunque finalmente algunas de las personas inscritas no llegaron a participar en la prueba, realizaron su aportación solidaria, por lo que cifra de casi 1.200 inscritos ha permitido conseguir más
de una tonelada de alimentos.
El área de Bienestar Social, que encabeza Carmen Lara, se encargará de distribuir los productos. Lara recogió el simbólico cheque acompañada por el concejal de Deportes, José Ignacio González, el teniente de alcalde de Gran Ciudad, Javier Bello, y el director de OKEYMAS en El Puerto, Antonio Leiva.
Por su parte la firma Makro donó cuatro magníficos lotes navideños, que fueron a parar a los cuatro participantes agraciados en el sorteo previo a la prueba, y desde OKEYMAS se rifaron cinco mensualidades para otros tantos afortunados a elegir en uno de los centros portuenses de la firma.
Tras un calentamiento de media hora, con la animación en todo momento de Batu Puerto, la carrera arrancó desde Pozos Dulces, pasando por lugares emblemáticos como Pozos Dulces, el Castillo de San Marcos, el Paseo Fluvial o la Plaza de Toros antes de finalizar, una hora después, en la Plaza Isaac Peral, donde coincidió con la animación que ya se vivía con las Campanadas Infantiles.
La San Silvestre desplegó su estética navideña, ya que medio millar de corredores, casi la mitad del total de inscritos, se ejercitaron tocados con los gorros de Papá Noel que el Ayuntamiento regaló a las primeras 500 inscripciones, dotando a la ruta de un cromatismo tan inédito como entrañable, al que también ayudaban numerosas camisetas del Club de Rugby Atlético Portuense.