La española Carolina Marín, número uno del mundo y doble campeona mundial, ganó el Abierto de Hong Kong tras derrotar en la final a la japonesa Nozomi Okuhara, novena en el ránking, en tres sets (21-17, 18-21 y 22-20).
La onubense pudo tomarse la revancha ante Okuhara, que el año pasado le infligió una dura derrota en las semifinales del torneo hongkonés, y sumó un nuevo título a su palmarés.
La japonesa, nacida el 13 de marzo de 1995, forzó a Marín, de 22 años, a emplearse a fondo y prolongó el partido hasta una hora y 24 minutos.
En la primera manga, la andaluza se distanció rápido (9-5), después Okuhara estrechó la diferencia y llegó a empatar a 15, pero la española recobró la ventaja con un 19-16 y a partir de ahí ya mantuvo el margen hasta llevarse el set (21-17).
El inicio del segundo juego fue más disputado, puesto que la japonesa tomó la iniciativa y abrió un hueco importante (6-12), hasta que un arrebato de la española hizo que igualara a 17 y obligó a que Okuhara tuviera a esforzarse para hacerse con la manga (18-21).
El tercer set comenzó igual que el segundo, con Okuhara por delante (0-2) y con la andaluza tratando de presentar resistencia hasta empatar (5-5), pero la diferencia fue que Marín consiguió esta vez ponerse por delante y abrir hueco (16-9).
Con ese amplio colchón, la española sólo tenía que gestionar su ventaja, aunque al final Okuhara llegó a ponerse a su altura (20-20), y Marín tuvo que sufrir para establecer el definitivo 22-20 que le permitió ganar el set, el partido y el torneo.