Pedro Fariñas tendrá que dejar de explotar el bar del Club Náutico Alcázar el próximo 13 de mayo, después de que le haya llegado una notificación de embargo por los tres meses que lleva sin pagar el alquiler del local. Fariñas aseguró a VIVA CÁDIZ que se había sentido “estafado”por el presidente del Club, que en su día le dejó de pagar los 36.600 euros de indemnización a cambio de recibir la concesión de este servicio por un periodo de seis años que concluirá en diciembre de 2014.
Fariñas explicó que entró a trabajar en el Club en 1985. Con el tiempo, tres trabajadores decidieron formar una cooperativa para encargarse del bar con el compromiso del presidente de que volverían a ser rescatados como trabajadores en el caso de que la aventura empresarial les fuese mal. A los tres años, la cooperativa fracasó, de manera que a dos de ellos se les indemnizó por mutuo acuerdo, mientras que a Pedro se le dio la opción de explotar el bar en solitario.
Según Fariñas, también se fijó que el alquiler sería de 1.200 euros mensuales durante los seis años, “algo que tampoco se ha cumplido, ya que me han ido subiendo la cantidad progresivamente hasta los 1.800 euros que estoy pagando ahora”. Fariñas ya tuvo un problema de impago hace un año, cuando tuvo que abonar 14.000 euros si no quería que le cerrasen el bar. Según él, no era capaz de hacer frente a todos los gastos que conllevaba tener este servicio abierto, entre otras cosas, por el alquiler tan elevado que tiene que abonar mensualmente. “Me sentí engañado. En su día pensé que esos 36.600 euros que me tenían que pagar de indemnización por despedirme como trabajador del Club me los iban a ir descontando de ese alquiler que tenía que pagar por explotar el bar. Pero no fue así. Ni vi los 36.600 euros, ni me han perdonado un sólo euro de alquiler. Se han quedado con mi dinero, y va a pasar lo mismo con toda la inversión que he hecho. Sólo la marquesina me ha costado 24.000 euros”.
Pedro Fariñas es consciente de que en diciembre concluye su contrato de explotación, pero espera que el presidente del Club reconsidere la situación y permita a los cuatro padres de familia que trabajan en el bar agotar el plazo. De esta manera, podrán aprovechar el verano, la subida de las ventas y Pedro Fariñas podrá sacar beneficios que le permitan hacer frente a las deudas que tiene pendientes en concepto de alquiler del local y con la Seguridad Social. Así, cuando llegue diciembre podrá empezar de cero sin arrastrar deudas.