Tras dos meses de parada biológica obligatoria, las embarcaciones puntaumbrieñas de arrastre han vuelto a faenar tras levantarse la prohibición de pesca para el sector en todo el caladero del Golfo de Cádiz.

La norma, dictada por la Junta de Andalucía, tiene como fin la recuperación de los recursos naturales de la zona, con el objeto de no desgastarlos y poder mantenerlos en el tiempo y en las mejores condiciones posibles. Los pescadores, por su parte, reciben subvenciones del Gobierno andaluz. En Punta Umbría, éstas fueron adelantadas por el Ayuntamiento y la Cofradía de Pescadores.

Las primeras jornadas no dieron malos resultados en cuanto al volumen de capturas, aunque luego, una vez en la lonja, los marineros se vieron sorprendidos por los precios, bajos dada la coyuntura económica actual. El tamaño del pescado, por otro lado, ha mejorado gracias a la parada.