La autopsia practicada al bebé de dos meses y medio fallecido el pasado sábado en Málaga tras ser presuntamente maltratado por sus padres, que se encuentran en prisión provisional, ha confirmado la muerte violenta del pequeño, según informaron a Efe fuentes cercanas al caso.
El menor, que murió el sábado, ingresó el pasado jueves en la Unidad de Cuidados Intensivos del Hospital Materno Infantil de Málaga con hematomas y lesiones cerebrales importantes que presuntamente le causaron sus padres, un hombre ruso de 23 años y una joven de 21 de nacionalidad ucraniana, ambos como domicilio en Benalmádena (Málaga).
Las fuentes añadieron que el Juzgado de Torremolinos encargado del caso ha decretado el secreto de las actuaciones.
El hermano mellizo del fallecido, que también está hospitalizado como consecuencia de las lesiones sufridas por los presuntos malos tratos ejercidos por sus padres, continúa estable, según informaron a Efe fuentes sanitarias.
La Junta de Andalucía, que ha decretado el desamparo provisional de este menor y ha asumido su tutela, estudia la posibilidad de que el bebé sea acogido por su familia extensa, en concreto por su abuela materna.
Según informaron fuentes de la Delegación Provincial de Bienestar Social, aún no existe una petición por escrito, pero en conversaciones con la abogada de la abuela se ha pedido a la Junta que estudie esta posibilidad de acogimiento familiar.
En caso de que el bebé reciba el alta médica y la Junta aún no haya adoptado una decisión al respecto, el niño será acogido de forma urgente por una familia, añadieron las fuentes.
Los progenitores de los mellizos ingresaron el pasado sábado en la prisión provincial de Alhaurín de la Torre acusados de un delito de malos tratos en el ámbito familiar.
El padre del menor tiene antecentes
De hecho, el padre, S. M, de nacionalidad rusa y 23 años, tiene antecedentes por diversos delitos, el último de ellos de junio de 2006, por malos tratos y amenazas. En concreto, le constan hasta cuatro detenciones previas por varios delitos como el de hurto, según informó ayer en un comunicado la Policía Local, que arrestó a los padres cuando acudieron al hospital el pasado jueves, ante las "incoherencias" en sus declaraciones.
Los padres manifestaron a los policías locales que habían dejado a sus hijos la noche antes con una niñera para poder ir a la discoteca, y sus declaraciones "en ningún caso coincidían con las lesiones referidas en el parte médico" en cuanto al tiempo, a lo que se añadían "indicios más que razonables" de malos tratos y abandono.
Además, cuando los agentes localizaron a los padres en la sala de espera, la madre, la ucraniana O. N, de 20 años, tenía a otro bebé en sus brazos -el hermano del que era atendido- quien con posterioridad se comprobó que también sufría múltiples traumatismos y lesiones, a pesar de que no habían solicitado asistencia médica para él.
La Consejería para la Igualdad y Bienestar Social de Andalucía ha recibido notificación de 2.268 denuncias por malos tratos a menores en lo que va de año, hasta el pasado 31 de agosto, según informó este departamento.
Esas denuncia, notificadas por centros sanitarios, escolares, sociales o a través del Teléfono de Notificación del Maltrato, han supuesto el inicio de 462 procedimientos de desamparo (el 21% de las denuncias).
El Teléfono de Notificación de Situaciones de Maltrato Infantil (900 851 818) recibió durante el primer semestre de este año 652 denuncias de presuntas situaciones de malos tratos -33 más que el mismo periodo de 2008-, que afectaban a 975 menores.
La mayoría de las denuncias (241) alertaban sobre casos leves, 221 a moderados y 190 a graves.
Por provincias, Sevilla acumuló el mayor número de éstas (209), seguida de Granada (97), Málaga (91), Cádiz (84), Almería (50), Córdoba (49), Jaén (41) y Huelva (31).
Chamizo pide un esfuerzo para activar mecanismos de prevención eficaces
Mientras, el Defensor del Pueblo Andaluz, José Chamizo, consideró ayer una "auténtica tragedia" el presunto caso de maltrato infantil detectado en Málaga y pidió, ante la concurrencia de este tipo de casos, un "esfuerzo" para activar mecanismos de prevención "eficaces", así como una "mayor concienciación por parte de la sociedad en general".
Según indicó Chamizo en declaraciones a Europa Press, ante el "horror" que supone que unos padres maltraten a sus hijos hasta el punto de llevarlo a la muerte, es "urgente" que se activen mecanismos de prevención, algo que aunque "difícil de articular, es necesario", porque, tal y como aseguró, "estamos ante un fenómeno más amplio que este caso en concreto, ya que vemos como hay un incremento en este tipo de sucesos".
Así, apostó por la creación de registros que identifiquen a las familias de riesgo, algo que, según recordó, ya se hace con familias que no tienen los medios económicos suficientes y que tiene que extenderse a otros núcleos que, aún disponiendo de una economía saneada, reúnan otras circunstancias que "puedan suponer un riesgo para los menores a su cargo".
Además, conminó a fomentar una "mayor concienciación social" ante este fenómeno que la que existe actualmente, de manera que "si cualquier ciudadano escucha voces o gritos de menores, actúe inmediatamente y lo denuncie", recordando que se admiten denuncias de forma anónima, las cuales, posteriormente, se confirman a través de diferentes mecanismos.
"Los poderes públicos tienen que hacer mayor hincapié en el conocimiento y lucha contra este fenómeno, así como en la inversión de recursos, que dista mucho de la línea de actuación que se ejerce con la violencia de género", apuntó.