Desde Juventudes Andalucistas, el secretario local, Manuel Raposo, es claro y tajante. Asegura que el PA aceptará el cambio de ubicación del botellón siempre y cuando “se den ciertas condiciones. Queremos controles de Policía Local para que no se cojan los vehículos propios ebrios, servicios públicos mínimos y se hagan gestiones para que el búho bus comience a funcionar de inmediato”. Entiende positivo el cambio debido a las obras que se realizarán en verano en el Calderón, aunque Raposo considera que el parque “es una zona cercana y abierta, pero nunca ha contado con los servicios mínimos exigidos por los jóvenes”.
Para el presidente de Nuevas Generaciones, Damián Bornes, el cambio es la mejor opción debido a los problemas que se derivan del hecho de que este fenómeno se concentre en el parque. Comprende las razones que han llevado a los jóvenes a asumir el parque como lugar de encuentro, debido a que no sólo es cómodo para los portuenses, puesto que hay zonas cercanas para aparcar, sino también porque es el lugar más accesible para los que llegan de fuera en tren o autobús, pero entiende que el paseo José Luis Tejada “está a diez minutos andando del centro”, para el joven que sea reticente a tomar el búho bus, y es un lugar espacioso para ofrecer todos los servicios necesarios, incluso “a la hora de la limpieza es positivo”. Asume Bornes que al principio “habrá quejas de la gente, pero consideramos que igual que hubo una primera vez para hacer botellón en el parque la habrá para el paseo”.
El presidente de Jóvenes Vecinos, Guillermo Gamero, en cambio es contrario a esta opción de traslado. Apunta que “el parque es la zona más céntrica y no hay muchas viviendas cerca. No ocurre como cuando la gente bebía en el Castillo de San Marcos o la plaza Colón. En cambio el paseo Tejada no tiene nada cerca, como ocurría también en el centro comercial de Vistahermosa. La gente acudía por la cercanía con los pubs y discotecas, como pasa en el Calderón”. Es más, asume que “la política de prohibir a los jóvenes qué hacer no es buena, lo interesante es concienciar. Explicar por qué se puede hacer el botellón en un sitio y no en otro, u ofrecerles actividades alternativas, así como premiar para que se deje el lugar limpio. No es cuestión de ir contra nosotros, sino contar con nuestra opinión”.
Esta misma idea es la que aportan los mediadores juveniles de Nexojoven. David Otero, en nombre de sus compañeros, admite que “si se cambia el sitio se debería contar con la opinión de los jóvenes”, apuntando que en el último consejo de la juventud se habló del posible cambio pero en ningún momento de las posibilidades a elegir, imponiendo por tanto el paseo José Luis Tejada.
Con todo, Nexojoven se posiciona contraria a “obligar a los jóvenes a tener que estar en un lugar concreto, puesto que el botellón es un fenómeno espontáneo y que nace debido a lo caro que es tomarse una copa en un bar. No estamos de acuerdo con ningún sitio por esa razón, pero pensando con lógica, lo idóneo es un lugar cercano al lugar de marcha para que los chavales no tengan que tomar sus vehículos propios”.
Este medio pidió a sus lectores internautas que mostraran su opción más viable entre el parque Calderón, el recinto ferial Las Banderas y el paseo Tejada, eligiéndose la primera opción como más positiva. Los colectivos consultados rechazan de manera unánime Las Banderas puesto que habría que habilitarlo con servicios y debido a la lejanía con la zona de marcha y la cercanía a carreteras generales.
