Por un momento las butacas del Teatro Cardenio de Ayamonte mostraban un aspecto desolador. Era la hora del comienzo de la Gala Benéfica que organizaba el IES Guadiana de la ciudad, con motivo de los actos que conmemoran el 60 aniversario de su fundación, y un sudor frio se estaba adueñando de Jarillo y González, organizadores del acontecimiento. Con retraso respecto a la hora de comienzo, pero al final comenzaba la gala y las butacas se iban ocupando lentamente, aunque en menor medida de lo previsto. Aspreato, asociación beneficiada con la misma, sufría las tristes consecuencias.
Roció Concepción ejercía de mantenedora del acto. Por el escenario el desfile de alumnos y exalumnos, profesores y exprofesores. Luces fuera, tan solo alguna de color para iluminar la primera actuación y los acordes del violín de Paco Barrera, saltando de butaca en butaca. Alicia Casado y su joven voz. Juan Cayuela la veteranía o Paula Seda melodiosa en esta ocasión. La guitarra de Tomas Rodríguez, alumno de la ESO, sorprendiendo a todos. Y magníficos como siempre Juan el Churrero y Eduardo Orta. Música y embrujo por el patio de butacas del familiar teatro y mucho arte por su escenario.
Una pausa para respirar y, de nuevo, a fijar la mirada en cada una de las actuaciones. Si mágica era la noche, Jesús Márquez ponía mucho más todavía con una enorme delicadeza, sonrisas, exclamaciones y finalmente aplausos para este maestro del ilusionismo. Adán Borges regalaba maestría y arte con su voz tan especial, mientras Dani Franco se recreaba con su estilo carnavalero y de buen letrista. Y no se quedó atrás Manolo Martín y dedicó un cuplé carnavalero de la autoría de Dani Franco al respetable, mientras su madre, Isabel María, arrancaba aplausos con unos fandangos de la tierra que quitaban el sentido. Jesús López venía de la Punta del Moral para dar unas pinceladas de su carrera como concertista de guitarra, dejando sin aliento al personal y finalmente Francisco y Tamara Vera, padre e hija, con enorme coordinación y por separado sorprendieron, ella con su cálida y moderna interpretación y él con un estilo propio del mejor tenor. Francisco levantó al público de sus asientos por la potencia, dominio y extraordinaria interpretación.
Y en medio de las actuaciones musicales los versos de Leticia Mestre, León Acosta en la voz de Miravent, de Rúa Nacher, de Arturo Giner y Raul Vela. Los Poetas del Guadiana, ex de la institución docente, sembrando la noche con la mejor cosecha de sus últimas creaciones. Próxima a sus voces, las melodías del piano, arrancadas por las delicadas manos de Ignacio Fauri.
Una noche especial, donde el arte en su más diversa muestra se dejó sentir entre los asistentes, que no solo disfrutaron, sino que tuvieron la ocasión de descubrir grandes valores de la canción o del dominio magistral de los instrumentos. Violín, guitarra o piano compitieron en noble lid para dejar impregnados los oídos de quienes tuvieron la suerte de presenciar sus melodías, fue una oportunidad única.
Y los actos con motivo de ese 60 aniversario del IES Guadiana continúan y nos dejan una invitación fehaciente para que volvamos de nuevo a estar presentes en el próximo.
