Según ha informado la compañía en un comunicado, de este modo, Emed Mining compromete con Goldman Sachs en torno al 15 por ciento de la futura producción de cobre de la mina durante ese tiempo, una estimación alcanzada según precios actuales del cobre.
La cantidad pactada cubre la inversión adicional estimada para acometer la restauración de terrenos afectados por otras empresas mineras que explotaron anteriormente Riotinto, cumpliendo así con los requerimientos de la Administración andaluza, y cubre también contingencias como revisiones previstas en las especificaciones o precios de los equipos, las fluctuaciones de las divisas y las necesidades de capital circulante. El acuerdo firmado está sujeto a los avances en el proceso de autorización de la apertura y cubierto por los procesos de auditoría y aseguramiento propios de una operación de tal envergadura.
Así, según señala la compañía, el acuerdo, sumado a los 30 millones comprometidos recientemente por la compañía china XGC, asegura la financiación total del arranque del Proyecto Rio Tinto, así como cualquier contingencia en los primeros años de producción. Estas cantidades se añaden a los 58 millones de dólares ya invertidos a lo largo de los últimos cinco años.
Tras estos acuerdos, EMED completa la financiación del proyecto minero de Riotinto, por lo que no serán imprescindibles nuevos instrumentos de financiación externos. Aún así, se prevé cerrar acuerdos de cobertura de precios del cobre y divisa para los primeros años de producción, con vistas a fortalecer la solidez del proyecto.
Respecto al acuerdo, el consejero delegado de EMED Mining, Harry Anagnostaras-Adams, ha señalado que los acuerdos con Goldman Sachs complementan los firmados con XGC, líder del sector de la fundición en China, "sumando entre ambos más de 200 millones de dólares de financiación adicional para el Proyecto".
La compañía agradece el apoyo brindado por estas organizaciones, junto al de los accionistas principales, como RCF (Resource Capital Funds), RMB Resources (Australia) y Royal Bank de Canadá, que "permiten establecer los cimientos del desarrollo y operación a largo plazo de la Mina de Riotinto", ha concluido.