Alrededor de 50 skaters han conseguido por sus propios medios que un solar que les prestó el Ayuntamiento se haya convertido en un coqueto skate park.
Lo que comenzó hace dos meses como un gran sueño para muchos de ellos es a día de hoy una realidad. Medio centenar de jóvenes con edades comprendidas entre los 4 y poco más de los 30 años han conseguido poner en valor de la nada un skate park en la calle Artesano José María Silva en Camposoto, concretamente en un terreno municipal localizado a la espalda del Centro Cívico Hermana Cristina, y que era un auténtico vertedero cuando ellos se pusieron manos a la obra. Recuerdan como estuvieron hasta dos días quitando hierba para dejar el solar diáfano.
Los grandes impulsores han sido los hermanos Daniel y Francisco Muñoz y Chiqui, encargándose los dos primeros de todo lo relacionado con la madera y el tercero de las labores de soldadura. El resultado son unas instalaciones impensables hace pocas semanas y que han costado alrededor de 2.000 euros, gracias a la colaboración en gran medida de los padres de estos jóvenes, que por fin cuentan con un sitio medio decente en el que practicar su deporte favorito. Medio decente porque lo ideal ahora sería que alguien les proporcionase hormigón para la pista, puesto que en cuanto lleguen las primeras aguas, probablemente se convierta en un lodazal.
Algunos de los equipamientos los han aprovechado del que tenían en la zona del Pedroso, que era de carácter municipal y que por sus reducidas dimensiones les suponía múltiples limitaciones a la hora de tener que practicar skate. Lo que sí que han hecho con sus propias manos ha sido una mini-rampa y una pirámide.
Todo este proceso forma parte de un proyecto que tienen en mente como es la creación del Club de Skate Javier Muñoz ‘Murdoc’, el militar isleño tristemente fallecido el pasado mes de febrero durante unas prácticas en el acuartelamiento de Hoyos de Manzanares de Madrid, gran amante de esta disciplina deportiva. De hecho, sus hermanos Daniel y Francisco son los grandes artífices de que el skate park de la calle Artesano José María Silva sea una realidad.
El Ayuntamiento En este sentido, el papel del Ayuntamiento ha sido el de ceder el terreno y, además, esta misma semana lo ha dotado de cuatro focos para que puedan practicar skate por la noche. El resultado ha sido que algunos días se han contado hasta 80 skater disfrutando de las instalaciones. Sin embargo, existe un matiz importante y es que dicho solar, en teoría, va a ser cedido a la Junta de Andalucía para la construcción de un nuevo centro educativo en Camposoto, dada la creciente demanda que existe en dicha zona de nuevos colegios. La incógnita es saber si realmente la Administración autonómica hará dicho centro escolar y, si lo va a hacer, si será a corto, medio o largo plazo.
Al menos, de momento y a la espera de acontecimientos, son muchos los practicantes de skate que cada día, principalmente en horario de tarde, pasan horas y horas dándole al patín en el improvisado skate park. Muchos de ellos, por la ubicación del mismo o por su corta edad, acuden en compañía de sus padres, que se convierten en improvisados espectadores del espectáculo que supone ver sin parar a entre 70 y 80 skaters al día.
Lo ideal, como cuentan ellos mismo, sería contar con instalaciones del nivel que hay en localidades cercanas como Cádiz o Chiclana, pero mientras esto sucede, al menos han cambiado las plazas principales de la ciudad por un sitio en el que apenas causan molestias y en el que pueden permanecer varias horas sobre sus tablas.