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Andalucía

Sánchez reivindica una España abierta y que defiende los valores de la Constitución

Alerta del cuestionamiento de la democracia, apuesta por una Europa más unida y rechaza la deriva militarista

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  • Pedro Sánchez durante la IX Conferencia de Embajadores. -

El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, ha reivindicado una España abierta frente al proteccionismo por el que parecen estar apostando cada vez más países y determinada a defender los valores recogidos en la Constitución en "un mundo cada vez más hostil y antagónico" en el que una "internacional reaccionaria" que busca una Europa "débil y desunida".

Ese ha sido el principal mensaje que el jefe del Ejecutivo ha querido trasladar a los 130 embajadores que representan los intereses de España por todo el mundo durante la IX Conferencia de Embajadores que clausurará esta tarde el Rey Felipe VI en la sede del Ministerio de Asuntos Exteriores.

"No vamos a renunciar a nuestros valores, que son los valores de nuestra Constitución y los vamos a defender y promover con más determinación", ha recalcado Sánchez, incidiendo en que "un mundo cada vez más hostil y antagónico no va a alterar nuestra hoja de ruta". "Aunque el viento sople en contra y con particular virulencia", España no va a renunciar a sus valores sino que, a su juicio, es el momento de defenderlos "con más ímpetu y más convicción".

Según Sánchez, "España lo que va a hacer es trabajar más decididamente para construir un mundo mejor y más justo en el que cuidemos aquello en lo que creemos y en lo que nos define como sociedad, que es la paz, la convivencia, la solidaridad y la libertad".

El jefe del Ejecutivo ha reconocido que los cimientos del orden internacional que surgió hace 80 años con el fin de la Segunda Guerra Mundial están siendo "más cuestionados que nunca y con particular intensidad".

"Lo estamos viendo especialmente estos días en los que se habla sin tapujos, de rediseñar fronteras, de interferir en procesos democráticos o de renombrar mapas", ha señalado el presidente, en una aparente alusión a las recientes declaraciones del futuro presidente estadounidense, Donald Trump, con respecto a Groenlandia y el Canal de Panamá.

ALZAR LA VOZ POR EL DERECHO INTERNACIONAL

Para ello, España seguirá "alzando la voz en pro de los Derechos Humanos y el Derecho Internacional" y redoblará su "compromiso con la democracia liberal y plural, abierta, transparente e íntegra".

Durante su intervención, que se ha prolongado durante 45 minutos, ha denunciado "la erosión creciente del Derecho Internacional y, particularmente, del Derecho Internacional Humanitario porque cada vez son más los actores que recurren al uso de la fuerza y la impunidad se abre paso mientras los crímenes se cometen a los ojos de una comunidad internacional que podríamos calificar como anestesiada ante ellos".

También ha alertado del "cuestionamiento frontal de la democracia en muchos países del mundo" como lo demuestran los intentos de magnicidio que se han producido, entre otros contra Trump, y las "graves injerencias en procesos electorales" como los de Rumanía, Moldavia o Georgia.

Asimismo, ha citado lo que se podría calificar de "elecciones 'fake', con las que regímenes autoritarios han intentado blanquear su desprecio a las libertades individuales, ignorando la voluntad popular expresada en las urnas" en una alusión aparente a las elecciones presidenciales en Venezuela, donde Nicolás Maduro tomó posesión el viernes pasado pese a que el vencedor fue el candidato opositor Edmundo González.

El año pasado, ha lamentado el presidente, "más de 40 países en todo el mundo dieron pasos hacia la autocracia" y en las últimas elecciones europeas la ultraderecha consiguió casi 200 eurodiputados con los que intentar "frenar el proyecto europeo" cada vez más apoyada con lo que el presidente francés, Emmanuel Macron, ha calificado de "internacional reaccionaria".

"Un mundo con menos democracia siempre va a ser un mundo más desigual, seguro e inestable, por tanto, hoy, más que nunca, defender la democracia es defender la paz en el mundo", ha reivindicado ante los embajadores.

ESPAÑA ABIERTA AL MUNDO

En este sentido, "frente a la tentación autárquica y el cierre de fronteras", Sánchez ha dejado claro que "España va a seguir apostando por la apertura, por una economía abierta a la internacionalización y por una gestión inteligente de las migraciones para seguir creciendo".

"España no se cierra sobre sí misma, como hacen cada vez por desgracia más países en el mundo" sino que "lo que hace es abrirse al mundo y lo hace con decisión, con convicción, con ambición y con voluntad firme de liderazgo" porque "tiene credenciales para hacerse escuchar", ha sostenido, esgrimiendo la buena situación de la economía e invitando a los embajadores a llenarse de "orgullo" cuando hablen de la transformación que está experimentando el país.

"En lugar de cerrarnos sobre nosotros mismos", ha argumentado Sánchez, lo que hay que hacer es defender una mayor apertura al comercio internacional "pero exigiendo reciprocidad, con un terreno de juego equilibrado". A su juicio, "justo ahora, cuando otros se cierran, debemos aprovechar ese viraje proteccionista de muchas grandes economías para tender nuevos puentes y ampliar nuestro peso en el comercio global".

MÁS EUROPA

Por otra parte, el presidente ha señalado que en este contexto internacional la disyuntiva es "más o menos Europa". "Europa es, ante todo, una comunidad de valores, es un faro de libertad y de democracia en el mundo" de ahí el que, ha añadido, se esté "enfrentando a enemigos muy poderosos, que la quieren débil y la quieren desunida, dividida".

"Por eso, es el momento de dar la cara por Europa", ha puntualizado, defendiendo que España puede tener "un rol preponderante" en estos momentos y ser "un motor" para lograr "una Europa más fuerte, fiel a sus valores y más unida".

Esto pasa, ha dicho Sánchez, entre otras cosas, por reforzar la industria de la defensa, en la que hay "carencias". Con todo, ha dejado claro que no comparte ni va "alentar jamás una deriva militarista que nos aboque a una nueva carrera armamentística".

"El mundo tiene prioridades más urgentes que atender", ha considerado el presidente, incidiendo en que "en ningún manual está escrito que la paz y la seguridad se conquisten reforzando arsenales". "España cree en la paz y en la diplomacia como fórmula para resolver conflictos y siempre defenderé que la seguridad va mucho más allá del gasto en defensa", ha acotado, defendiendo que actualmente nuestro país "invierte casi diez veces más que la media aliada en operaciones de mantenimiento de paz".

El presidente también ha querido referirse a la inminente toma de posesión de Trump en Estados Unidos como presidente. En este sentido, ha dicho que "España quiere seguir profundizando y afianzando la relación estratégica con Estados Unidos y el vínculo transatlántico que nos une". "Estados Unidos es un aliado imprescindible para hacer frente a los desafíos de nuestro tiempo y para la defensa también de nuestro modelo de convivencia", ha acotado.

En otro orden de cosas, y como ha hiciera ayer el ministro de Exteriores, José Manuel Albares, durante la inauguración de la conferencia ha dejado claro que el reconocimiento del catalán, el euskera y el gallego como lenguas oficiales de la UE "seguirá siendo una de nuestras principales prioridades políticas" en 2025.

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