Concretamente la Policía ha informado que un hombre, como consecuencia de unas lesiones sufridas en la noche del 24 de diciembre, tras ser atendido en el Hospital Comarcal y posteriormente remitido al Hospital Regional Carlos de Haya, debido a su gravedad, falleció en la noche del 29 al 30.
El inspector jefe de la Comisaría, José Antonio Alés, explicó que los hechos tuvieron lugar durante la Nochebuena, cuando se recibió una llamada telefónica procedente del Hospital en la que se informaba que había ingresado una persona en estado comatoso y que como su estado había empeorado iba a ser trasladado en un helicóptero del 061 hasta el Hospital Carlos Haya de Málaga.
Practicadas las debidas gestiones se pudo averiguar que el fallecido, K.E.H., varón, de nacionalidad marroquí y de 23 años de edad y residente en Ronda, había sido asistido a la calle Cruz Verde las 06,15 horas, tras haber recibido el servicio de urgencias una llamada indicando la necesidad de su presencia.
En las posteriores investigaciones realizadas por la Policía se pudo comprobar que con el herido había otras dos personas en aparente estado de embriaguez, que ayudaron a introducirlo en la camilla de la ambulancia que llevó a cabo la asistencia.
Aunque no se ha formulado ninguna denuncia sobre lo ocurrido, los funcionarios del Grupo de Policía Judicial continuaron las gestiones iniciadas por los del Grupo de Seguridad Ciudadana, identificando y localizando a posibles testigos de la causa de las lesiones que finalmente provocaron la muerte de K.E.H., instruyendo a la vez un atestado que se envió al Juzgado de Instrucción de Guardia, a cuya disposición pasó una persona de nacionalidad francesa, de 27 años.
Y es que, según la Policía, las gestiones que se practicaron llevaron a la conclusión de que el individuo en cuestión pudiese haber tenido alguna participación en los hechos que terminaron con la muerte del ciudadano marroquí.
Además se da la circunstancia de que tanto el fallecido como el detenido eran amigos, aunque desde la Comisaría no se han querido aportar más datos, hasta que avancen las investigaciones.
Muerte por ingesta de alcohol
Por otra parte, también en la Noche buena se produjo otro hecho luctuoso, ya que, según precisaron fuentes de la Comisaría rondeña, también se registró la muerte de una mujer de 33 años de edad, siendo la causa aparente una excesiva ingestión de alcohol.
No obstante, en la misma nota policial se especifica que la noche del 31 de diciembre, coincidiendo con el nuevo año, no registraron incidentes de gran relevancia.
