A lo largo del día va a tener lugar la salida de grupos de yeguas y potrillos no vendidos
La Feria Ganadera de Almonte vuelve a vivir estos días un evento que viene realizándose desde hace más de quinientos años en la localidad: la feria del ganado marismeño, vinculada a la Saca de las Yeguas.
De este modo, La feria ganadera concluye este miércoles, y a lo largo del día va a tener lugar la salida de grupos de yeguas y potrillos no vendidos --"prácticamente todos" según los criadores de ganado marismeño--, serán devueltos a las marismas de Doñana por sus propietarios. La vuelta no es común, sino escalonada y en pequeños grupos, ajustándose a los horarios de cada cual.
Según ha informado el Consistorio en una nota, desde el pasado domingo por la noche, las 23 nuevas cuadras del recinto ganadero municipal 'Huerta de la Cañada' se han llenado de yeguas, potrillos, relinchos y viejas faenas de tuza y marcado a hierro de potros, de usos y formas que pasan de generación en generación y traen al presente la ancestral actividad ganadera de los yegüerizos almonteños con imágenes que parecen sacadas del pasado.
El Recinto Ganadero Municipal, que ha estrenado este año las importantes instalaciones que fueron inauguradas este lunes por el alcalde de Almonte, José Antonio Domínguez Iglesias (PP), con la participación de la Asociación de Criadores de Ganado Marismeño, es un hervidero de actividad dentro y fuera de las cuadras.
Cientos de visitantes contemplan las singulares imágenes que produce el faenar de los yegüerizos con el ganado, o los corros informales en los que se cierran los tratos de venta de los pocos ejemplares vendidos, que no seguirán el camino de vuelta a la marisma tras haber cambiado de dueño.
Raza autóctona marismeña
Las yeguas están legalmente reconocidas como raza única en el mundo 'Raza Autóctona Marismeña' en peligro de extinción. En el recinto se encuentra un veterinario habilitado por la Administración competente que controla los cambios de titularidad y las guías de transporte. Otros veterinarios trabajan por libre en la identificación de los potros que vienen sin el microchip, por haber nacido este año, a los que se les recoge además una muestra de pelo para hacer el seguimiento de la raza autóctona marismeña.