La Hermandad de los Dolores del Cerro del Águila llegaba al corazón de Sevilla atravesando grandes avenidas como Ramón y Cajal, la Enramadilla o Carlos V.

El Nazareno de la Humildad, el Santísimo Cristo del Desamparo y Abandono y Nuestra Señora de los Dolores, llenaban estos grandes espacios de la ciudad, al son de cornetas y tambores, acompañados siempre por su barrio.

Tarde de contraluces en un cielo amenazante de lluvia, en una jornada en la que hicieron su salida cinco de las ocho cofradías de la nómina del Martes Santo en Sevilla.