El mallorquín de Yamaha ha culminado un año bestial, ha ganado siete de 15 carreras hasta ahora y sólo en una ha estado fuera del podio
El piloto español Jorge Lorenzo se ha proclamado campeón del mundo de MotoGP después de haber acabado tercero en el Gran Premio de Malasia disputado este domingo en el circuito de Sepang, por detrás de Valentino Rossi (Yamaha) y Andrea Dovizioso (Honda).
El mallorquín lo tenía todo a favor para convertirse en el segundo campeón español de la máxima categoría --tras Alex Crivillé hace once años en 500 cc--, ya que le bastaba con terminar entre los nueve primeros, salía desde la 'pole position' y el único rival que le podía superar matemáticamente en la clasificación, el también español Dani Pedrosa (Honda), estaba fuera de la carrera por una lesión.
Lorenzo salió muy bien y aguantó la primera posición durante varias vueltas. Además, algunos de sus rivales se lo iban a poner aún más fácil, como Casey Stoner (Ducati) que se fue al suelo en la segunda vuelta, o Rossi, que salió muy mal y perdió varias posiciones.
Sin embargo, el italiano, que con la de hoy acumula seis victorias en Sepang, demostró por qué es considerado el mejor piloto de todos los tiempos y fue adelantando rivales hasta pegarse a Dovizioso y Lorenzo, que se habían destacado del resto del grupo.
En la vuelta nueve, Dovizioso adelantó al español, que no forzó en ningún momento por temor a irse al suelo, y un giro después era Rossi el que rebasaba a su compañero de equipo. Al final, Rossi logró su victoria 105 por delante de Dovizioso y Lorenzo. Alvaro Bautista terminó quinto, igualando su mejor puesto en MotoGP, y Héctor Barberá fue undécimo.
El nuevo campeón mundial completa así un año espectacular, ya que de las quince carreras disputadas hasta ahora ha ganado siete y tan sólo una vez, en Japón la semana pasada, terminó fuera del podio.