A la familia se le imputan dieciséis robos, la mayoría a entidades financieras de las localidades gaditanas de Puerto Real, Jerez, Cádiz y San Fernando, cuyo botín asciende a 60.000 euros.
Las fuentes han indicado que la investigación se abrió el pasado 23 de octubre con el primer robo que esta familia de Jaén perpetró en Cajasol en Puerto Real.
En los atracos participaban el cabecilla de la familia, de 46 años, su hija de 23 años, sus tres hijos varones de 20, 17 y 16 años y la compañera sentimental del padre, que, según han señalado las fuentes, era la hija de una antigua pareja suya.
Según las investigaciones policiales, el padre entraba en el establecimiento junto a uno de sus hijos con pistolas de fogueo y se llevaban lo recaudado en la caja.
Fuentes policiales han destacado que estos individuos tenían un “nivel de profesionalidad alto” ya que “actuaban con rapidez, utilizaban walkie talkies en vez de teléfonos móviles con lo que dificultaban su localización a los agentes”. Tanto el padre como los hijos tenían un perfil de atracador violento, ya que “en las entidades bancarias encañonaban a los clientes que iban entrando”.