Joan Francesc Ferrer 'Rubi' se estrena este sábado como entrenador del Almería, en el partido que le medirá en el Estadio de los Juegos Mediterráneos al Oviedo, y lo hace con la idea de mantener la ilusión del equipo por el ascenso directo, opción que perdió peso en las últimas semanas y que motivó la destitución del técnico portugués José Gomes.
La meta del ascenso directo no se le ha borrado de la mente al nuevo entrenador de los almerienses, que espera recuperar las buenas formas perdidas en los últimos ocho partidos, en los que, sin dominar las áreas, el equipo sólo consiguió sumar una victoria, en La Rosaleda ante el Málaga.
Encajando goles en seis de esos ocho partidos, la restauración del sistema defensivo es una de las máximas que persigue el nuevo técnico. "Mi mentalidad es la de ayudar al máximo para que corrija algunos aspectos defensivos", dijo el jueves en su presentación el preparador barcelonés.
Todo para enfrentarse a un rival, el Oviedo, del que dijo "es un buen equipo", aunque se centró en los suyos.
"Lo que más me preocupa es mi equipo. Jugaremos ante un equipo que juega muy bien y que, en los últimos partidos fuera, está teniendo resultados cortos. Vamos a sudar sangre", avisó Rubi.
El técnico se va a encontrar con dos jugadores menos por las sanciones de Ivanildo Fernandes y Lucas Robertone, además de que se está a la espera de ver qué pasa con Balliu, que ha entrenado con normalidad tras unas mermas físicas y podría volver a la titularidad.
Rubi no ha ofrecido pistas sobre cómo afrontaría el partido del sábado, aunque se antoja que no habrá muchos cambios debido a que han sido pocos los días que ha tenido para trabajar con la plantilla.
El Oviedo viaja mermado por las bajas en banda, donde no tiene a Nieto por lesión y pierde esta semana a Sangalli por sanción, lo que ha hecho a Ziganda incluir en la lista a dos efectivos del filial -Sandoval y Álex Suárez-.
Los azules tampoco tendrán a su entrenador a pie de campo, y es que la expulsión del navarro ante el Girona devolverá la batuta a Bingen Arostegi -su segundo- en el Estadio Juegos Mediterráneos.
Ziganda confía en mantener la distancia con el descenso -ahora de 5 puntos- y seguir dependiendo de sí mismos, objetivo que chocará con la intención de Rubi de estrenarse con victoria, un técnico que para el oviedista "suma experiencia y orden a uno de los mejores equipos ofensivamente hablando de la categoría".
La plantilla azul llega con varias incógnitas al duelo, ya que con Viti convocado, pero sin haber entrenado ni un solo día con el grupo por sus molestias, queda vacante la banda derecha de Marco Sangalli.
Ziganda podría colocar ahí a Borja Sánchez, habitualmente en la izquierda, y dejar ese otro flanco para Nahuel, pero tampoco está claro que Blanco Leschuk, que solo se entrenó dos días por un golpe en las cervicales, pueda salir de inicio en punta y eso dificulta prescindir de Nahuel en esa posición.
Es por ello que Ziganda, que también tiene a Javi Mier lesionado, ha incluido en la lista al extremo Dani Sandoval y al mediocentro Álex Suárez, ambos del filial, aunque otra de las opciones para incluir en ataque es un Borja Valle que puede jugar en la mediapunta y que hasta ahora no ha tenido regularidad.
- Alineaciones probables:
Almería: Makaridze; Balliu o Buñuel, Maras, Cuenca, Akieme; Morlanes, Samú Costa; Corpas, Aketxe, Lazo; y Sadiq Umar.
Oviedo: Femenías; Diegui Johannesson, Grippo, Arribas, Mossa; Edgar, Tejera; Borja Sánchez, Borja Valle, Nahuel; Leschuk o Rodri.
Árbitro: Saúl Ais Reig (Comité Valenciano).
Estadio: Municipal de los Juegos Mediterráneos.
Hora: 18.15.