El Adesa 80 de Voleibol entrena en el Pabellón Cubierto del Complejo Polideportivo Municipal de Sanlúcar de Barrameda con la mente puesta en la próxima temporada. Hubo momentos, desde que se declaró el Estado de Alarma y posteriormente la puesta en marcha de las restricciones para cumplir con el protocolo para combatir contra la pandemia, en los que dejó de entrenar. Los menores de 16 años no podían ejercitarse a las partir de las seis de la tarde y pasada esa hora era imposible afrontar las sesiones. El equipo senior masculino ni entrena ni compite. Sí lo hacen el equipo alevín mixto, el infantil femenino, el cadete femenino, el cadete-juvenil femenino y el cadete masculino. Los responsables de llevar los entrenamientos son Raquel, Tomás y Juan Gálvez. Ninguno de estos equipos están en competición y sí que entrenan para regresar a la competición en un futuro.
Raquel manifestó que “hemos empezado con fuerza y confiando en que haya menos incertidumbre. Las jugadoras y los jugadores están muy motivados. Hemos reestructurado el club pensando en regresar a la competición la próxima temporada”.
Añade que “se están incorporando más niñas al proyecto porque parece que ahora hay más tranquilidad. Hemos compuesto grupos burbujas para no mezclar las jugadoras”.
Los entrenamientos se celebran los martes, miércoles, jueves y viernes por espacio de una hora y media cada grupo. Los mismos se realizan con restricciones, manteniendo las distancias y con las correspondientes medidas de seguridad. El material se desinfecta constantemente. En este sentido valora que “dispongo del Pabellón Cubierto del Polideportivo en su totalidad al no mezclarnos cono otros clubes”.
De las competiciones señala que “los equipos que han disputando partidos lo han hecho sin público, algo que se echa de menos. Lo que todos queremos es que regrese la normalidad cuanto antes”.
Las jugadoras y jugadores del Adesa 80 de Voleibol están obligados a tener su licencia federativa para entrenar a pesar de no competir. El Ayuntamiento de Sanlúcar, tiene, de esta manera, un mayor control de quienes son los deportistas que utilizan las instalaciones en una época donde la pandemia debe estar vigilada en todo momento. El club sanluqueño confía en que la temporada 2021-2022 sea muy diferente e iniciar así una nueva etapa.