Tras la nevadas, el hielo es el principal riesgo para retomar la normalidad

Tras las nevadas causadas por Filomena, que siguen hoy en menor medida en el noroeste peninsular, donde la situación más complicada es en Teruel, las labores se centran en la limpieza de la nieve en vías de comunicación y ciudades, mientras el hielo empieza a aparecer por la bajada de las temperaturas.

A partir de esta madrugada se espera la llegada de una ola de frío, con un acusado descenso de las temperaturas a partir del lunes, con temperaturas inferiores a 10 grados bajo cero en zonas de montaña y áreas llanas nevadas, afectando a puntos donde esta circunstancia es muy poco frecuente, según la Aemet.

El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, ha presidido esta mañana una reunión del Comité Estatal de Coordinación y Dirección del sistema nacional de Protección Civil para evaluar los efectos del temporal.

La ministra de Defensa, Margarita Robles, ha señalado, en declaraciones en Cope, que en Zaragoza la situación es "complicada", pero el mayor riesgo está en Teruel, por los efectos de la borrasca en las próximas horas y también por el hielo que se ha instalado en muchas ciudades una vez que ha cesado de nevar y las temperaturas están bajando.

La Unidad Militar de Emergencias ha comenzado a desplegarse en Aragón, en las localidades de Daroca (Zaragoza) y Castellote (Teruel), ante la difícil situación por las nevadas en la Comunidad, donde siguen los problemas en casi toda la red de carreteras y permanecen embolsados cerca de 1.900 camiones.

El temporal Filomena, que causó ayer dos muertos, cuyo vehículo fue arrastrado por una riada entre las localidades de Mijas y Fuengirola (Málaga), ha dejado vías cortadas, calles intransitables, accesos impracticables, por ejemplo en hospitales, y árboles caídos.

Por eso, las tareas en Madrid y en otras ciudades donde ha nevado deben centrarse -ha destacado Robles- en la limpieza, para evitar que caigan masas de nieve de árboles y edificios, aunque "lo más prudente" es quedarse en casa "y salir solo lo necesario".

Esta mañana, el paso de Filomena afectaba a 716 vías, de ellas 165 cortadas -tres de ellas en la red principal-, según la DGT, que alertaba de lo complicado de la situación en Aragón y de la existencia de hielo en numerosas calzadas.

La ciudad de Madrid, donde ayer se produjo una nevada histórica, comienza ahora una segunda fase de vuelta a la normalidad, que se augura compleja, pues las bajas temperaturas hacen que el manto blanco empiece a congelarse.

El director de la Agencia de Seguridad y Emergencias de la Comunidad de Madrid, Carlos Novillo, ha pedido a los ciudadanos evitar todo desplazamiento que no sea absolutamente necesario y que, en la medida de sus posibilidades y en condiciones de seguridad, ayuden a quitar nieve en accesos a portales o garajes para evitar que se congele.

Ya no quedan conductores atrapados en las carreteras de la región, pero medio millar de personas tuvieron que pasar la noche en distintas dependencias municipales, ya que no podían regresar a sus casas tras ser rescatados de sus vehículos.

El alcalde de la ciudad, José Luis Martínez-Almeida, ha dicho a Cope que la prioridad es reabrir al tráfico arterias principales en todos los distritos, aunque no cree que se pueda recuperar una movilidad "razonable" hasta "finales de la semana que viene", pues "es muy complicado" retirar la nieve y el hielo de las más de 9.000 calles de la ciudad.

Mientras, los efectivos de la Comunidad, de los ayuntamientos y de la Unidad Militar de Emergencia (UME) se afanan en limpiar la nieve, con actuaciones, entre otros puntos, en pistas y carreteras, en los accesos a Mercamadrid y el aeropuerto de Barajas.

Para ayudar a los ciudadanos a llegar a los centros sanitarios el Ejército del Tierra participa con sus ambulancias en el traslado de enfermos a diversos hospitales de la Comunidad de Madrid, que colaboran con los servicios de emergencias y sanitarios de la región.

Patrimonio Nacional, tras reunir esta mañana a su Comité de Dirección de forma telemática, ha decidido extender el cierre de sus monumentos en la Comunidad de Madrid y en la provincia de Segovia hasta el próximo miércoles, incluido, como "medida de seguridad" por las consecuencias adversas de la borrasca.

Entre los monumentos afectados se cuentan el Palacio Real de Madrid, El Escorial, la Granja de San Ildefonso en Segovia o El Palacio Real de Aranjuez.

El Gobierno de Castilla-La Mancha mantiene activo el dispositivo especial de carreteras debido al temporal. El consejero de Fomento, Nacho Hernando, ha destacado, en una nota de prensa, que las "prioridades siguen siendo las mismas que desde el principio".

En este sentido, cita la asistencia al ámbito sanitario, evitar que la gente se quede atrapada en las carreteras y escoltar a los equipos de las empresas de suministro eléctrico, de agua y de gas para que puedan resolver las averías como consecuencia del temporal.

Además, aconseja que no se salga a las carreteras a no ser que sea "estrictamente necesario" pues el hielo se convierte en un factor "muy peligroso y de riesgo extremo".

En la Comunidad Valenciana, donde las temperaturas mínimas han alcanzado este domingo valores en torno a cuatro grados bajo cero en el interior de la provincia de Castellón, 207 camiones permanecen bloqueados (embolsados) en la autovía A-23 y la carretera N-232, ambas en la provincia castellonense.

Según la Agencia Valenciana de Seguridad y Respuesta a las Emergencias, los esfuerzos están centrados en reabrir las carreteras cortadas en la provincia de Castellón y en intensificar la limpieza con sal de las calzadas para evitar que se forman placas de hielo por las bajas temperaturas.

En Cataluña, el temporal dejo anoche sin suministro eléctrico a 4.900 clientes de las comarcas de Tarragona y en las Tierras del Ebro, por lo que la compañía Endesa ha movilizado generadores y ha desplazado a equipos al territorio para localizar las averías y resolverlas.

Además, 14 municipios de diversas comarcas especialmente en Tarragona y las Tierras del Ebro, se han quedado sin cobertura de telefonía móvil, mientras que en ocho localidades del Priorato tampoco tienen servicio de telefonía fija.

A lo largo de la noche, los Bomberos han atendido 83 avisos por el temporal, principalmente por problemas causados por el viento en el litoral central, para asistir a personas afectadas por las nevadas y para hacer revisiones de vías en el sur de Cataluña.