El presidente de la Xunta, Alberto Núñez Feijóo, ha mostrado este lunes su "preocupación" por la evolución que pueda tener la covid-19 en los periodos de cuatro días que se avecinan, entre el 24 y el 27 de diciembre y entre el 31 de diciembre y el 2 de enero, cuando se prevé un mayor movimiento de población y de actividad de ocio.
"Nos vamos a jugar muchas cosas (en esos días), los costes en infecciones, en algún caso en salud y también, por qué no, en vidas de algunas personas y también la intensidad de la tercera ola que puede venir en el mes de enero", ha dicho en un acto en Santiago de Compostela.
Núñez Feijóo ha explicado que mañana mantendrá una reunión con los responsables de la Policía Local de las ciudades, así como de la Policía Nacional y la Guardia Civil en Galicia, y la Delegación del Gobierno, para pedirles "un esfuerzo" en la vigilancia y el cumplimiento de las normas en esos ocho días, especialmente en zonas comerciales y de hostelería.
Ha asegurado que esta reunión, de la que ha avisado a los alcaldes, se produce al ser la Xunta la "autoridad delegada durante el estado de alarma".
De este modo ha replicado, aunque sin mencionarlo, al secretario general del PSdeG, Gonzalo Caballero, que ayer criticó que Núñez Feijóo se saltase a los alcaldes y le reprochó su "improvisación" para prevenir la pandemia.
El presidente gallego ha indicado, además, que mañana martes también habrá información del comité clínico que asesora a la Xunta y que se reúne esta tarde.
Ha evitado avanzar qué decisiones puede adoptar la Xunta tras esta reunión hasta escuchar al comité y analizar los datos con incidencias a siete y tres días, básicamente desde la reunión anterior.
En cualquier caso ha considerado que la tendencia muestra que el Gobierno gallego hizo "bien" al cerrar de nuevo Santiago de Compostela, que tiene una situación "compleja", y ha insistido en aguardar a la reunión del comité de esta tarde para analizar los últimos datos.
