El número de parados registrados en las oficinas de los servicios públicos de empleo (antiguo Inem) se disparó en 302.365 desempleados en marzo (+9,3%), su mayor repunte en cualquier mes de toda la serie histórica, debido a la crisis originada por el coronavirus, según datos del Ministerio de Trabajo y Economía Social publicados este jueves.
El volumen total de parados alcanzó así al finalizar marzo la cifra de 3.548.312 desempleados, la más alta del registro desde abril de 2017.
Trabajo ha señalado que el Covid-19 ha cambiado la tendencia de la evolución del paro con la que se había iniciado marzo, ya que en los doce primeros días del mes el paro sólo subía en 2.857 personas.
La subida del desempleo en marzo es la más alta registrada nunca en la serie histórica. Supera en más de 100.000 personas el que hasta ahora era el mayor repunte: el de enero de 2009, cuando en plena crisis económica el desempleo subió en casi 200.000 personas.
El dato de paro de marzo no incluye a los trabajadores que se encuentran en suspensión de empleo o reducción horaria como consecuencia de un ERTE, ya que la definición de paro registrado no los contabiliza como desempleados.
Marzo suele ser un mes de descenso del desempleo. En toda la serie, iniciada en 1996, sólo se han registrado aumentos del paro en los marzos del periodo 2009-2012, en plena crisis económica, y ahora, en marzo de 2020, por la crisis sanitaria.
En términos desestacionalizados, el paro subió en marzo en 311.037 personas, mientras que en el último año el desempleo acumula un aumento de 293.228 personas (+9%).
LOS SERVICIOS SUMAN 200.000 PARADOS MÁS
El impacto de la crisis sanitaria y las medidas de confinamiento para superarla pasaron factura a todos los sectores económicos en el mes de marzo, pero especialmente al sector servicios y a la construcción.
El primero registró el mayor aumento del desempleo en términos absolutos, 206.016 desempleados más (+8,9%), concentrando así más de dos tercios de lo que subió el paro en todo el mes. La construcción, por su parte, experimentó el mayor repunte en valores relativos, un 22,9%, tras sumar 59.551 desempleados.
Les siguieron la industria, con 25.194 nuevos desempleados (+9,1%); la agricultura, que añadió 6.520 parados a las listas (+4,2%), y el colectivo sin empleo anterior, con 4.984 parados más (+1,9%).
SUBE MÁS ENTRE LOS VARONES
El paro subió en marzo en ambos sexos, aunque más entre los hombres, con 178.967 desempleados más (+13,2%), frente a un ascenso del desempleo femenino de 123.298 mujeres (+6,5%). Así, al finalizar el tercer mes del año, el número de mujeres en paro se situó en 2.019.370 y el de varones, en 1.528.942.
Por edades, el desempleo entre los jóvenes menores de 25 años subió un 10% en marzo, con 26.112 parados más que en febrero, mientras que el paro de las personas con 25 años y más aumentó en 276.153 desempleados (+9,2%).
El paro subió en marzo en todas las comunidades autónomas, especialmente en Andalucía (+138.569 parados), Comunidad Valenciana (+35.565) y Cataluña (+21.833). Por provincias, sólo se redujo en Melilla (-129 parados) y aumentó en las 51 restantes, encabezadas por Sevilla (+31.813 parados), Málaga (+30.234) y Cádiz (-25.649).
El paro registrado entre los extranjeros subió en marzo en 34.974 desempleados (+8,5%) respecto al mes anterior, hasta situarse el total de inmigrantes en desempleo en 443.554, con un repunte de 40.871 parados en el último año (+10,1%).
BAJA LA CONTRATACIÓN UN 26%
En cuanto a la contratación, en marzo se realizaron 1.256.510 contratos, un 26,5% menos que en el mismo mes de 2019, de los que 145.393 fueron contratos indefinidos, el 11,6% del total, con un descenso del 19,1% respecto a marzo del año pasado.
Del total de contratos indefinidos realizados en marzo, los contratos a tiempo completo sumaron 89.309, un 17,9% menos que en igual mes de 2019, en tanto que los contratos indefinidos a tiempo parcial sumaron 56.048, con un retroceso anual del 21,1%.
Del resto de contratos, 1.111.117 fueron contratos temporales, de los que el 25,5% fueron eventuales por circunstancias de la producción a tiempo completo y el 27,6% fueron de obra o servicio, también a tiempo completo. Por su parte, los contratos temporales con jornada a tiempo parcial supusieron el 27,1%.