Ayer sábado se vivió el último día en el recinto instalado en la Playa de la Hierbabuena de Barbate. El Festival Cabo de Plata, que se ha desarrollado durante cuatro días, despedía su cuarta edición con el respaldo de más de 33.000 jóvenes diarios que han apoyado el festival llegados desde distintos puntos de España y con la satisfacción de la organización de cerrar la primera edición a su cargo sin ninguna incidencia destacable y unas mejoras considerables a nivel de infraestructura general donde ha primado el bienestar de los miles de asistentes.
Con un impacto económico de 10 millones de euros que recae íntegramente en el pueblo de Barbate y su entorno, unos mil trabajadores internos y externos y una proyección turística a nivel nacional es uno de los eventos musicales más generosos de la provincia de Cádiz.
En su última jornada los caboplateros pudieron disfrutar de grandes conciertos como el de Juanito Makandé que desplegó un bonito vuelo con su habitual cuadro de sentimientos, La Pegatina, que fue uno de los shows más multitudinarios, con su espectacular fiesta ambulante cargada de ritmos, la elegancia pop-folk de La M.O.D.A, el trap femenino de Bad Gyal y los raperos del momento, los número uno Natos y Waor, el dúo sin censura y líderes en todas las plataformas musicales consiguieron ser el grupo de la noche. Y para colofón festivalero un show especialmente esperado y divertido como fue el de Locoplaya con Don Patricio y Bejo llevando la batuta en el Escenario Idealista, un huracan granadino donde los haya, Eskorzo en el Escenario Desperados y un set esclusivo de drum&bass con los australianos-británicos Pendulum DJ Set en el Escenario Brugal.
El viernes vestido de novia irrumpía en el escenario El Canijo de Jerez con su enganche garrapatero habitual y con esas canciones pegadizas y de barrio que tanto gustan. Rayden hacia lo propio en el Escenario Idealista que no paró de convocar gente en toda la noche llegando a sus momentos más álgidos con las actuaciones trap de Kaydy Cain y Maikel Delacalle junto con la del propio Rayden. Hacia la una de la madrugada llegaba la hora de escuchar rock reividicativo del bueno, de ese que ya ha creado escuela como es el de los madrileños BOIKOT que estuvieron sembrados y convocaron a miles de festivaleros que aguantaron el tipo para después escuchar la fuerza arrolladora de los grandinos Hora Zulú. Los grandes protagonistas de la noche fueron ellos, el trío de rap cubano más romántico con el que han crecido algunas generaciones y que hoy en día los más jóvenes siguen cantando sus canciones. Orishas están de vuelta y no lo han podido hacer mejor, su regreso a España fue en CABO DE PLATA con un espectacular directo recordando temas como “Sastre de tu amor”, “Nací Orishas” y “A lo cubano”.
Las últimas horas de la madrugada fueron para el el corazón de la rima de RAPSUSKLEI, la versatilidad del rapero del polígono norte de Granada, MAKA y para una de las actuaciones más aclamadas, la del rapero FOYONE que va por buen camino ‘for president’. El cierre de la noche pasadas las 5.30h de la madrugada fue para los holandeses Yellow Claw, uno de los puntales referentes de Europa de la música de baile con base electrónica.
El jueves comenzaba a ritmo guerrillero en clave femenina con Machete en Boca y los sonidos bullangueros de La Regadera. Algo más tarde las canciones con alma de Muerdo sonaban mientras la fiesta seguía con el combo Alamedadosoulina. El rock llegó de la mano de unos veteranos La Fuga mientras los fans del rap aprovechaban el momento de ver a unos crecidos Dante y Blake seguidos de Soge Culebra. Ya caída la noche llegaba Che Sudaka con su mezcolanza de culturas y vuelta al rock más combativo con El último que zierre. Nach partió literalmente el escenario en dos con sus clases magistrales de rap con cuchillo pero sin sangre y Rels B regaló uno de los momentos más esperados de la noche con su trap-rap más joven y actual. La orquesta balcánica Dubioza Kolektiv subió la temperatura en la playa gaditana incitando al baile y preparando la llegada de una de las reinas de la noche, la mediática Lola Índigo que cautivó a todo un festival con su “Ya no quiero ná”. Fernando Costa protagonizó el subidón hip hop de esta nueva generación que ya está marcando una nueva historia. La noche terminó bailando con la sesión de General Levy, las canciones de calle y corazón de Nikone y el ska-punk de Talco. La madrugada la despedía Foreign Beggars, la explosión rap londinense que acabó con los últimos supervivientes en el recinto.
El miércoles se vivió el arranque del festival con DJ SHEMMA que fue el encargado de inaugurar la tarde a las 18h con una sesión que congregó a buen número de seguidores siguiéndole Byamont Brossy Estela Amaya que invitaron con ritmos aflamencados a despedir los últimos rayos de sol. Walls aparcó sus batallas de gallos y presentó su nuevo proyecto con algo totalmente distinto y hacia las 22h tocó el turno para el rap más joven con Hard GZ que entusiasmó a los muchos fans que vinieron para verle. La fiesta más playera tomaba forma con la llegada de los rockeros Mafalda pero si hay un grupo andaluz que disfrutan todas las generaciones y se vuelven locas bailando, ese es O´Funkillo y la noche fue para ellos conquistando a los primeros caboplateros que llenaban el escenario en su primer día. La madrugada se despedía con la explosión de colores de Paint Animals que dejó con buen sabor de boca y con ganas de más a los miles de asistentes.
La organización agradece el apoyo de todos los caboplateros que han hecho posible su realización. Cabo de Plata agradece especialmente al pueblo de Barbate por su cálida acogida, al Ayto. de Barbate, Cuerpos de Seguridad y Sanitarios, Patrocinadores como Brugal, Desperados, Idealista, Red Bull, medios oficiales como Radio 3, Sol Música, La Fresca FM, Unika Fm, Mariskal Rock y otros colaboradores.