Un jurado popular enjuiciará a partir de este lunes en la Audiencia Provincial de Sevilla a un hombre para el que la Fiscalía solicita 23 años de cárcel por asesinar a su expareja sentimental en octubre de 2016 en la localidad de Olivares.
Según han informado fuentes del Tribunal Superior de Justicia de Andalucía (TSJA), está previsto que el acusado declare el 14 de mayo.
En su escrito de acusación, el Ministerio Público reclama para J.M.R.M. 20 años de cárcel, 10 de libertad vigilada y la privación de la patria potestad respecto de los dos hijos menores de la pareja por un delito de asesinato con la agravante de alevosía, así como 3 años de prisión por un delito de violencia habitual en el ámbito familiar.
La Fiscalía también pide que indemnice con un total de 360.000 euros a los dos hijos menores de edad (150.000 para cada uno), la madre (40.000) y un hermano (20.000) de la víctima.
Según el escrito, al que ha tenido acceso Efe, el acusado y la víctima mantuvieron una relación sentimental fruto de la cual nacieron dos hijos y convivieron en la República Dominicana hasta que en 2012 llegaron a España y fijaron su residencia en Olivares.
El acusado "comenzó a controlar, aislar y humillar" a la mujer cuando vivían en la República Dominicana y esa situación "se agravó" ya en España, donde el hombre llegó a amenazar a su pareja con un arma blanca en febrero de 2016 "porque ella no quería mantener relaciones sexuales".
"El 16 de septiembre de 2016, la víctima llegó al domicilio familiar y, sobre las 22.50 horas, el acusado le dijo que "la había estado vigilando y que sospechaba que estaba con otro hombre", por lo que presuntamente le propinó varios puñetazos cuando "estaban presentes los hijos menores de la pareja", algo que sucedió tanto en esa ocasión como en otras.
Debido al "temor" que le infundía el acusado, la víctima se separó de él y en octubre de 2016 se marchó a otra vivienda en Olivares junto a sus hijos, indica la Fiscalía, que añade que el crimen ocurrió sobre las 12.30 horas del 16 de octubre de 2016, cuando la fallecida se encontraba con sus hijos en la vivienda donde trabajaba cuidando de un matrimonio de ancianos.
El encausado acudió en su vehículo para recoger a sus hijos y, cuando la mujer salió junto a ellos a la puerta del domicilio, "de forma sorpresiva y sin que se pudiera defender, la cogió por los pelos y la tiró al suelo", se puso "encima de ella" y "le clavó repetidas veces" un cuchillo que "había cogido previamente con la intención de acabar con su vida" mientras los niños, de 5 y 3 años, "lloraban y gritaban".
Según el Ministerio Público, la víctima "no tuvo posibilidad de defenderse ante lo sorpresivo del ataque y la superioridad física" del investigado, quien a continuación "se montó en su vehículo para huir del lugar", pero "al darse cuenta de que no llevaba a los niños, dio marcha atrás unos metros y les dijo que se montaran, lo cual hicieron".
