Marchadora en la distancia de 50 kilómetros, Ainhoa Pinedo, licenciada en la rama de Ciencias de la Actividad Física y del Deporte, prepara con intensidad y mimo, su oportunidad de oro para demostrar que las mujeres, pueden competir al máximo nivel en una disciplina que por primera vez, no será única y exclusivamente de hombres.
Así narra Pinedo en primera persona para Viva su experiencia para llegar a lograr una meta, que para la categoría femenina, era impensable: “Imagina la satisfacción que siento, al ser una de las pioneras a nivel nacional e internacional en llegar a correr la única prueba del atletismo que quedaba aún por igualar a los hombres”, explica.
“Todo comenzó cuando hace dos años se pone en contacto conmigo una atleta norteamericana. Ella ya llevaba en su país varios meses luchando por participar en los 50 km y a raíz de ahí, lo solicita a nivel internacional. Es cuando se pone en manos de un abogado estadounidense que a su vez se pone en contacto con las mujeres marchadoras que queríamos disputar esa distancia. Se presenta seguidamente una demanda en Estados Unidos y posteriormente en el Campeonato del Mundo de Londres 2017 y se gana esa demanda, por lo que la Federación Internacional a partir de aquí, se ve obligada a poner esa distancia para las mujeres”, cuenta.
Una corriente de optimismo que derivó en que dicha denuncia, también fructificara con Berlín como destino: “Es oficialmente este año cuando se presenta otra demanda contra la Federación Europea para poder participar en los campeonatos de Europa de Berlín y volvemos a ganarla. Y es en enero de este año, cuando públicamente se anuncia la entrada de esta disciplina en el Europeo y cada una de las atletas nos movemos en nuestras respectivas federaciones nacionales para solicitar y exigir que hubiese campeonatos nacionales de 50km para poder clasificarnos para Berlín”, declara la marchadora.
Un hito para las mujeres atletas a las que sin embargo, aún les queda un último bastión discriminatorio que superar: “El proceso judicial de hecho sigue en curso, ahora en el Comité Olímpico Internacional, pues para los Juegos Olímpicos de Tokio 2020, todavía no está confirmada de manera oficial que la distancia vaya a salir”, expresa.
“De hecho, en Berlín quedaremos con nuestro abogado en cuestión y supongo que las mujeres volveremos a firmar un documento similar de cara al 2020, pues es la única disciplina que aún no está registrada en el programa olímpico, siendo el lugar y acontecimiento más importantes. Sería muy injusto que no estuviese esta prueba tras aprobarse para unos Europeos y Mundiales, por lo que guardo la esperanza de que todo prospere de manera positiva”, afirma.
Después de combatir y vencer a tamaña injusticia deportiva, son seis plazas las que se reservan para que las atletas españolas puedan participar en Berlín, cuyos campeonatos se celebrarán a partir del próximo 7 de agosto y hasta el día 12 de este mismo mes.
La ilusión es tal, que pese a que la temporada en el 2018, no ha estado exenta de complicaciones; según la propia Pinedo la posibilidad de alcanzar el metal en Berlín, no es ni mucho menos un quimera: “Hablar de alcanzar una medalla es un poco arriesgado. Evidentemente mi estado físico no es el mismo que si hubiese podido preparar el campeonato sin problemas físicos. pero mi experiencia me dice que puede pasar de todo. Con la quinta mejor marca y mi experiencia en esta disciplina, nada es imposible”.
Reportaje gráfico: ANDRÉS CASTILLO