El presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, cumplió su compromiso de poner en libertad a algunos opositores y llamó a una "pacificación" nacional, aunque las excarcelaciones representan una ínfima parte en la lista de "presos políticos" del país.
"Hoy han salido en libertad por petición mía como jefe de Estado un grupo de dirigentes y militantes de la oposición que habían cometido delitos de violencia política entre los años 2014, 2015, 2016 y en las guarimbas (protestas violentas) del 2017", dijo Maduro desde el palacio presidencial de Miraflores.
El mandatario recordó que estas liberaciones se enmarcan en el plan de reconciliación nacional anunciado por él tras ser reelegido el pasado 20 de mayo en unos comicios no reconocidos por numerosos gobiernos y en los que no participó la principal coalición opositora por considerarlos fraudulentos.
"Ya un primer grupo ha recibido los beneficios de esta política de pacificación que quiero llevar al más amplio nivel (...) quiero un proceso de pacificación", prosiguió y consideró estas excarcelaciones como un "intento sólido y firme para el reencuentro y la reconciliación de los venezolanos".
Según el líder chavista, los 39 "activistas políticos" que se beneficiaron con estas libertades condicionadas "estaban procesados por ejercer violencia política" y habían sido "enjuiciados".
"Es un acto de generosidad, de benevolencia y espero que se entienda como tal", dijo, para luego criticar a los "sectores radicales" que ven esta política como una muestra de debilidad de la revolución bolivariana que lidera.
En este sentido, dijo esperar que los excarcelados "salgan con un mensaje de paz y de buena voluntad" y remarcó que quienes conspiren contra su Gobierno o busquen "caminos fuera de la constitución para vulnerar la paz recibirán su castigo".
El Tribunal Supremo de Justicia (TSJ) de Venezuela ordenó hoy las excarcelaciones y explicó que se aplicaron libertades plenas, medidas cautelares de presentación cada 30 días y prohibición de salida del país, fórmulas alternativas de cumplimiento de pena, entre otras.
Entre los 39 excarcelados anunciados hoy se encuentra el exalcalde de San Cristóbal (oeste) Daniel Ceballos.
Sobre Ceballos, reconocido con el premio Sájarov a la Libertad de Conciencia del Parlamento Europeo junto a otros actores de la oposición venezolana, recaen medidas cautelares que le obligan a presentarse ante los tribunales cada 30 días, no hacer declaraciones ante medios de comunicación ni a través de las redes sociales.
El fiscal general del país, Tarek Saab, dijo en una reunión parcialmente televisada con algunos de los liberados que pronto habrá nuevas excarcelaciones y que la lista final será "amplia y representativa".
Por su parte, Delcy Rodríguez, presidenta de la Asamblea Constituyente, un suprapoder integrado solo por oficialistas y que no es reconocido por la oposición y por buena parte de la comunidad internacional, pidió a los liberados "hacer suyo" el mensaje de paz del jefe de Estado venezolano.
La ONG Foro Penal, que lidera la defensa de los considerados presos políticos en Venezuela, informó horas después de que se concretaran las liberaciones de que solo 19 de las 39 personas puestas en libertad integraban la lista de presos políticos.
El director ejecutivo de la organización, Alfredo Romero, explicó que son 357 los "presos políticos" y espera confirmar cada excarcelación anunciada hoy por el Ejecutivo para actualizar sus registros.
De ese total, detalló el jurista, 50 son mujeres y 307 hombres, 12 son menores de edad, solo 23 están formalmente condenados, 58 están bajo arresto domiciliario (como Leopoldo López), y 12 tienen órdenes de excarcelación desde hace meses que no han sido acatadas por las autoridades penitenciarias
Entretanto, sectores de la oposición venezolana han denunciado que entre los liberados figuran 16 personas que están acusadas por agredir a un diputado contrario al Gobierno durante un acto político en Caracas el pasado 2 de abril.
Por su parte, el presidente del Parlamento venezolano, Omar Barboza, aseguró en la ciudad colombiana de Cúcuta que las liberaciones en su país son "puertas giratorias" con las que el Gobierno busca legitimar el "fraude" de las elecciones presidenciales del 20 de mayo.
"Nunca han debido estar presos, siempre es importante que estén en libertad, pero esperamos que no se sigan convirtiendo esas libertades como hasta ahora en puertas giratorias, que sueltan diez y meten veinte. Esperamos que sea algo sincero y no una apariencia de amplitud para que se reconozca el fraude", dijo a Efe Barboza.