El tiempo en: El Puerto

Cádiz

"Era el momento adecuado para que otro se pusiera al frente del PP"

Teófila Martínez: peleona, apasionada y orgullosa de haber sido la alcaldesa de Cádiz durante 20 años

Publicidad AiAndaluc�a Informaci�nPublicidad AiPublicidad Ai
Publicidad AiPublicidad Ai
Publicidad Ai
Publicidad Ai
Cargando el reproductor....

Su mirada lo dice todo. Nunca ha podido contenerse cuando alguna emoción o sentimiento la embargaba. Ojos empañados que demuestran que aún tiene sentimientos por esta ciudad a la que dice que le debe todo y que ha sido una privilegiada por ser su alcaldesa. El Partido Popular ya no tendrá a ese seguro de votos que era Teófila Martínez.Ha cedido el testigo a Juan José Ortiz y ahora se le nota más tranquila. Su mirada lo dice todo.

Teófila Martínez.

¿Qué papel toma ahora Teófila Martínez?


–No me voy. Me hago a un lado, pero voy a seguir participando en el proyecto de mi partido. Esté donde esté voy a seguir defendiendo lo mejor para mi ciudad, intentando ayudar. No es un adiós a la política, ni mucho menos, sino una renuncia voluntaria, una decisión muy personal de no presentarme en las próximas elecciones.

¿Qué motivos le han llevado a tomar esa decisión?

–Las personas, seamos políticos o no, debemos ser respetuosas y honradas con nosotros mismos. En el caso de los políticos, con mayor obligación y responsabilidad, tenemos que ser responsables, coherentes y consecuentes. Defender lo que uno cree. Era lo mejor para que mi partido optase a gobernar la ciudad pero no porque yo no tenga la misma pasión, ni ideas (que se verán reflejadas en las propuestas del PP).

Después de estos tres años de parálisis total y de falta de ambiciones para la ciudad, el PP está obligado a presentarse con unas propuestas de gobierno que obtengan el respaldo de los gaditanos, pero también con un equipo que obtenga la mayoría de los votos con un nuevo motor. En estos 23 años, nuestro proyecto ha sido avalado en cinco ocasiones casi con el 60% de los apoyos. Cumplimos el programa electoral y fuimos más alla.

Creo que es el momento adecuado para que un nuevo responsable de ese equipo haga frente a los nuevos retos de la sociedad. Yo encantada de estar ahí, defender y ayudar con todas mis fuerzas, pero creo que mi trayectoria vital se quedaría corta. No consiste en presentarse a unas elecciones para después dejar las cosas a mitad de camino. Esto ha pesado mucho.

¿Qué apoyos ha recibido?

–Estos dos últimos años gente que nunca había votado al PP, y que me veía por la calle, me animaba a seguir en la primera línea. Pero, con Juan José Ortiz creo que las cosas van a ir muy bien. También de cara al partido me apoyaron y me dijeron que la decisión que yo tomara la iban a respaldar, tanto si me presentaba como si no. Ha sido una decisión libre, aunque algunos no se lo quieran creer. Hay que juzgar porque su compromiso personal y político coincida con su manera de actuar.

¿Con qué sabor de boca se queda tras estas semanas?

–Mentiría si no dijera que ha habido un momento que estaba hecha un lío. Ahora cada vez lo tengo más claro, sobre todo después de la designación de Ortiz como candidato. Es como si me hubieran puesto unas pilas alcalinas. Con la esperanza y la alegría de cuando uno hace las cosas porque cree que es lo mejor. Siempre he puesto por delante a Cádiz no mi ideología.

¿Cómo ha cambiado Teófila desde el primer día que entró en Alcaldía a día de hoy?

–En muchísimas cosas. Lo más importante en nuestra sociedad y en estos tiempos es ser capaz de aprender todos los días con humildad. He tenido la gran suerte de poder trabajar por una ciudad a la que adoro y respeto muchísimo y he aprendido muchísimo desde el niño más pequeño hasta la persona más mayor, de distintos estratos,  personas de otros países, de otro carácter profesional... He aprendido mucho y me siento como si me hubieran hecho un regalo inmenso. Ser la alcaldesa de Cádiz cuando lo sientes y quieres ser una esponja para ponerlo a disposición de tu ciudad te permite atesorar una serie de conocimientos y vivencias que te hacen estar más rápido. Ver tu ciudad como un todo y las posibilidades en un entorno más amplio.

¿Qué le ha dado Cádiz a usted? ¿Y usted a la ciudad?

–Me ha dado la posibilidad de vivir intensamente cada minuto de mi vida. He tenido el honor de vivir intensamente cada minuto y eso tiene un valor incalculable. Cuando trabajo disfruto, pero en Cádiz es fácil. Cuando acabas machacado, salir a la calle y encontrarte a personas que te cuentan su historia con tanta dignidad y tanta sabiduría es un privilegio. No tengo el concepto de haberle dado, he estado al servicio de mi ciudad: unas veces me he equivocado y otras he acertado. Lo más importante es que a la política no vas obligado.

¿Alguna decepción?

–No. Soy una persona práctica, no me gusta perder mi tiempo ni hacérselo perder a los demás en cuestiones que no merecen la pena.

¿Ha tenido la sensación de sacrificar su vida o la familia por la política?

–Nunca, porque tanto mi familia como mi partido me han respetado. Mi familia siempre ha estado en su sitio. En mi casa, mis padres fueron muy críticos, aunque se sentían contentos con lo que hacía, pero querían que todo lo hiciera más deprisa. Si la familia es feliz porque cada uno de los miembros se respeta, es un lujo.

¿Ha sido feliz?

–Yo soy feliz. Da miedo decirlo, pero he tenido momentos donde he sido más feliz y otros menos, porque no es un estado permanente. Hacer lo que a uno le gusta y lo que cree y poder dedicarse a ello, aunque tenga momentos duros y difíciles es un privilegio.

¿Cómo le gustaría que la recordaran?

–Como una persona normal. Estaríamos perdiendo el tiempo todos los que hacemos política si lo hiciéramos para que nos recordaran de alguna manera. No soy tan pretenciosa.Todos esos egos que algunos manejan no sirven para nada. Con el ego no se solucionan los problemas de la ciudad.  De lo que más orgullosa me siento como militante de mi partido y como alcaldesa en estos años es de haber ejecutado, con mayor o menor acierto, nuestros programas electorales que, en algunas cuestiones, eran muy ambiciosos. Y si no hubiéramos tenido el apoyo de la mayoría, se habrían quedado por el camino. Todo ello gracias a los gaditanos y al modelo de ciudad”.   

Teófila Martínez.

Cuestiones políticas

“Soy muy apasionada y peleona en la política. Eso se traduce en todo lo que haces y en el debate político. Pero aún así tengo el mayor de los respetos a todas las personas que han sido mis adversarios políticos. Nunca me habrá escuchado  nadie hablar mal políticamente de alguna persona. Lo que pensaba lo decía en los debates políticos”. Pasional, peleona y casi con incontinencia verbal. Una actitud que contrastaba con la presentada por la ex alcaldesa en los plenos de esta legislatura.

Aún así, y aunque “no me merece la pena”, se refirió a preguntas de esta periodista al episodio de tensión vivido con el alcalde de Cádiz. “Es la política.  Si en política dices lo que piensas y lo dices con palabras que están en el diccionario y no son ofensivas no va más allá. Me sorprende que algunos que ahora están en el poder, después de haber insultado a todo el mundo, tengan la piel tan fina. Si yo hubiera levantado un pleno o una junta porque un concejal hubiera pedido que un punto se quedara sobre la mesa me habrían dicho de todo menos bonita -sobre todo la extrema izquierda”. En su exposición explicó el momento donde un grupo –que no era el proponente de la iniciativa- pide que se quede sobre la mesa y el alcalde sin preguntar al proponente levanta el pleno y se va... “¿Qué es? Una cacicada, un abuso de poder, y se lo dije después de levantar el Pleno. No es un insulto. Es libertad de expresión, es la calificación de una actitud. Es como cuando nos llaman fascistas, y yo nunca me he sentido fascista, soy demócrata”.

Durante el mandato de Teófila Martínez tenía lugar la crisis económica y el Gobierno local se veía obligado a incrementar la aportación económica para los servicios sociales. Los acusaron, más de una vez, de haber praticado una política asistencialista. Sin embargo, Martínez lo tiene claro: “ Ha sido hecha con el corazón y con recursos públicos, por lo que nunca puede ser asistencialista, sino una política que trataba de resolver los problemas lo más rápido posible. Nos encontrábamos que las ordenanzas no servían o tenían límites para resolver los problemas de muchas familias. Nuestra política era de verdad y por recursos no iba a quedar. No era engañosa, al contrario de lo que pasa ahora, que les ofrecen bajarles la luna a los más vulnerables y al final no cumplen”.

La ex alcaldesa recordó cuando tuvo conocimiento de que dos concejalas de su equipo de Gobierno estaban avalando a algunas de esas familias necesitadas. “Cuando me entero llevo una resolución para que se abone antes del 5 de cada mes el 90 por ciento de la ayuda al alquiler para que no tengan problemas. Es política social adaptada a las circunstancias del momento. Nada de asistencialismo”, afirma tajante.

TE RECOMENDAMOS

ÚNETE A NUESTRO BOLETÍN