Jerez tiene por delante dos semanas cargadas de actividades para celebrar simbólicamente la recolección y pisado de la uva gracias a las Fiestas de la Vendimia, un evento al que hosteleros y comerciantes esperan sacar partido. El ciclo festivo, cuyo inicio ha sido el más prematuro de los últimos años, arrancó el viernes, y a partir de ahí llega la hora de comprobar si los esfuerzos por difundir la programación han dado sus frutos tanto dentro como fuera de la ciudad.
De hecho desde la Asociación de Comerciantes del Centro de Jerez, Acoje, piden “más implicación” a los propios jerezanos en las distintas convocatorias y que no se baje la guardia en la difusión de la programación (concursos, rutas por viñas, vendimias en familia, entre otras), mientras esperan al menos “igualar” el balance de hace un año tras un verano discreto.
Si bien el ambiente ha acompañado en las terrazas, especialmente en las noches cuando refrescaba (la asignatura pendiente sigue siendo el día), en líneas generales la temporada estival se ha desarrollado hasta el momento, según las estimaciones de la presidenta de Acoje, Nela García, en la misma tónica que el año pasado tanto en la hostelería como en el comercio e incluso ligeramente mejor. “Hemos igualado agosto, pero no se ha recuperado la bajada (por las ventas) que registramos en el mes de julio”, explica García, que tiene claro que son los turistas los que “nos salvan en verano”. En este sentido, resalta la repercusión de las compras realizadas en comercios por parte de turistas y visitantes de la provincia.
En cualquier caso el verano no ha acabado y septiembre tiene aún mucho que decir.
La ocupación cae casi cinco puntos en agosto
La ocupación hotelera se situó en agosto en un 85,47%, lo que supone casi cinco puntos menos que en 2016. En septiembre será aún peor, según Horeca, que prevé un 70,02% frente al 79,62% de hace un año.
