Al menos trece miembros del grupo terrorista Estado Islámico (EI) y cuatro de sus prisioneros murieron hoy por ataques aéreos de la coalición internacional, liderada por EEUU, en la provincia de Alepo, en el norte de Siria.
El Observatorio Sirio de Derechos Humanos informó de que los bombardeos tuvieron como blanco zonas de la ciudad de Yarables y sus alrededores, que están bajo el control del EI, en el noreste de Alepo y cerca del río Éufrates.
Los prisioneros perdieron la vida cuando excavaban trincheras en los alrededores de la ciudad, un trabajo impuesto como castigo por el EI.
A fines de marzo pasado, el Observatorio informó de que la policía del grupo yihadista (hisba) estaba trasladando a presos de las ciudades de Al Raqa, Al Bab y Menbesh a la zona de Yarables.
El traslado se efectuó después de que hubiera informaciones sobre que las Fuerzas de Siria Democrática (alianza árabe-kurda enemiga del EI) se preparaban para lanzar una ofensiva contra Yarables.
Los presos -civiles y combatientes de grupos rivales al EI- son obligados a excavar trincheras con el objetivo de proteger la ciudad de un posible ataque.
Actualmente está vigente en Siria un alto el fuego aceptado por el Gobierno de Damasco y la Comisión Suprema para las Negociaciones (CSN), principal alianza opositora, del que está excluido el EI.
Anoche, el grupo terrorista perpetró varios ataques en la localidad de Al Dumair, en la periferia de Damasco, contra las fuerzas del régimen y contra una cementera.
Decenas de trabajadores de esta fábrica de cemento se encuentran en paradero desconocido desde entonces, probablemente secuestrados por el EI, según el Observatorio.
